La familia García Baquero ha anunciado el inicio inminente de las obras de su Museo del Queso, un proyecto que la compañía espera poder inaugurar durante el Corpus de 2026, considerado un momento clave para la ciudad de Toledo. En caso de que no sea posible cumplir con esta fecha, la apertura se estima para septiembre u octubre del mismo año. La presentación del proyecto tuvo lugar este martes en el patio acristalado del Ayuntamiento de Toledo, con la participación del consejero delegado de Quesos García Baquero, Miguel Ángel García Baquero; el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez; y Joaquín Robes, encargado de desarrollar los contenidos del museo.
García Baquero ya cuenta con la licencia de obras desde hace unas semanas y planea generar empleo de calidad para un mínimo de 11 personas, cifra que podría aumentar hasta 20 en temporadas de mayor demanda. La compañía prevé una afluencia de más de 150.000 visitantes durante el primer año de funcionamiento.
La inversión inicial del proyecto, que incluye la adquisición del edificio y las primeras inversiones en obra civil e instalaciones de iluminación y refrigeración, se estima en unos 3,5 millones de euros, con una inversión total proyectada de 6 millones de euros. Miguel Ángel García Baquero reveló que la empresa se fundó en 1962 en Alcázar de San Juan y que su legado familiar, centrado en los valores de tradición y origen, se ha mantenido a lo largo de los años. La compañía exporta sus quesos a más de 60 países.
García Baquero destacó el deseo de su fundador, Hersilio García Baquero, de crear un museo del queso que la región “tanto se merece”, subrayando la historia rica que se podrá contar a través de esta iniciativa. Este museo también tiene como objetivo contribuir a la divulgación y apreciación del queso y de la región, promoviendo su reconocimiento entre los visitantes nacionales e internacionales.
Además, el Museo del Queso pretende ser un homenaje al sector productor y a la España vaciada, al tiempo que apoya el desarrollo económico y empresarial de Castilla-La Mancha, generando nuevas fuentes de riqueza y empleo. García Baquero espera que el museo se convierta en un referente a nivel nacional e internacional, comparable a otros importantes museos, y desea que los visitantes puedan conocer el sector, los orígenes de la empresa y aprender sobre la cata de quesos.
La elección de Toledo como sede del museo se debe al profundo enamoramiento de la familia García Baquero por la ciudad, que describen como “la más bonita del mundo”. Miguel Ángel García Baquero agradeció el apoyo del alcalde, quien lo animó a hacer realidad este sueño y lo acompañó en la búsqueda de un “edificio maravilloso” rodeado de jardines en pleno barrio de la judería.