El Ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Saar, ha enfocado sus esfuerzos diplomáticos en estrechar lazos con partidos de extrema derecha en Europa, destacando entre sus interlocutores a Vox en España, así como al Reagrupamiento Nacional en Francia y Demócratas Suecos. Esta estrategia fue revelada en la red social X por el periodista Barak Ravid, conocido por sus análisis en Axios y la CNN.
Saar ha instruido, desde hace tres semanas, el inicio de conversaciones estratégicas con dichas facciones, dejando de lado, por el momento, a otras formaciones políticas como Alternativa para Alemania y el Partido de la Libertad austriaco, posiblemente por la percepción de asociaciones neonazis en su historia. Sin embargo, con Vox, la conexión parece más fluida y de larga data, aunque no siempre se haya canalizado a través de la oficialidad diplomática israelí.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ya establece relaciones directas con el partido gobernante de Israel, el Likud, através de figuras como Amichai Chikli, ministro de la Diáspora judía. La relación entre ambos bandos se ha fortalecido gracias a la mediación de David Hatchwell, un empresario ligado a la comunidad judía y fundador de ACOM, un importante lobby proisraelí en España.
En el ámbito del Parlamento Europeo, Vox se alinea con otros partidos de extrema derecha bajo el conglomerado «Patriotas por Europa», compartiendo espacio con entidades similares como el Reagrupamiento Nacional francés, entre otros.
La visita de Abascal a Israel en diciembre de 2023, promovida por Hatchwell, le permitió observar de cerca las consecuencias de los ataques de Hamás, y fortalecer sus lazos con figuras políticas israelíes de renombre como Avi Dichter, actual Ministro de Agricultura. Esta interacción subraya el nivel de compromiso y apertura entre Vox e Israel, más allá de las figuras políticas tradicionales.
Las declaraciones de Chikli sobre Abascal reflejan la afinidad ideológica que comparten, sobre todo en su visión de la civilización occidental frente a las amenazas del relativismo moral. Este acercamiento se ha hecho más evidente con el discurso pronunciado por Saar en Madrid, donde criticó duramente la posición del Gobierno de Pedro Sánchez respecto a Palestina.
No obstante, la situación diplomática entre España e Israel atraviesa un momento delicado, evidenciado en la percepción negativa hacia Vox por parte de algunos sectores, debido a su controversial historial de miembros vinculados a corrientes neonazis y revisionistas del Holocausto. A pesar de esto, las relaciones bilaterales mantienen su cauce a través de la interacción entre partidos y la mediación de figuras clave como Hatchwell.
La estrategia de Israel de entablar lazos con partidos de extrema derecha en Europa resalta una tendencia creciente a buscar alianzas basadas en intereses comunes, como la seguridad y la lucha contra el terrorismo, más allá de las diferencias ideológicas o políticas pasadas.