En el marco de la festividad del Día del Pilar, la ciudad de Ciudad Real y, en particular, el barrio que lleva su nombre, han vivido un momento muy esperado y emotivo. Se trata de la inauguración de la remozada Plaza de La Pilarica, que ha sido bendecida por el párroco de la iglesia en el inicio de la procesión que recorrió las calles del barrio.
El párroco de la iglesia del Pilar, acompañado por el alcalde de Ciudad Real, fue el encargado de bendecir la plaza en honor a la patrona del barrio. En un acto solemne, ambos líderes religiosos rogaron al Señor que bendijera el lugar recién remodelado y a la imagen de la Virgen del Pilar que la preside. También expresaron el deseo de que esta plaza se convierta en un espacio de encuentro para los vecinos, bajo la mirada amorosa de Nuestra Madre la Virgen de El Pilar.
El alcalde Francisco Cañizares, junto con representantes de la Corporación Municipal, la Hermandad de la Virgen del Pilar, la asociación de vecinos y la Guardia Civil, acompañaron a la imagen de la Virgen en el recorrido procesional, compartiendo esta celebración con los habitantes del barrio. La Banda Municipal de Música de Ciudad Real y la banda de cornetas y tambores de la Hermandad de Pilatos amenizaron la procesión con sus acordes.
La remodelación de la emblemática Plaza de la Pilarica incluyó el mejoramiento de la pavimentación, la incorporación de elementos ornamentales de jardinería y nuevo mobiliario urbano. Además, se llevaron a cabo la sustitución de las redes de saneamiento e iluminación por tecnología de bajo consumo. Todo esto fue posible gracias a la financiación obtenida a través de Fondos Europeos FEDER, en el marco de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi).
Las imágenes que acompañan esta noticia muestran la belleza de la nueva plaza, así como la emoción de los vecinos y autoridades al participar en este importante acontecimiento. Sin duda, esta remodelación será un aliciente para los habitantes del barrio del Pilar, quienes ahora podrán disfrutar de un espacio público renovado y acogedor, en honor a su patrona y bajo su atenta mirada.
