La división de honor presentará grandes retos, mantenerse realistas es clave

Ángel Pablo Sendarrubias, entrenador del BSR Puertollano, manifestó su satisfacción por el reciente ascenso del equipo a la División de Honor de Baloncesto en Silla de Ruedas. Este logro, según mencionó, no solo representa una gran alegría para toda la entidad, sino que también plantea nuevos y significativos desafíos. Consciente de la intensidad y la dificultad que conlleva competir en este nuevo nivel, Sendarrubias recalca la importancia de mantener los pies en el suelo y abordar la siguiente temporada con prudencia y determinación.

La preparación de cara a esta nueva etapa ya ha comenzado para el equipo de Puertollano. Sendarrubias subraya que uno de los principales objetivos es consolidar un conjunto competitivo que pueda enfrentarse a los retos de la División de Honor. Esto podría incluir fortalecer el equipo con nuevos fichajes que complementen y potencien las habilidades actuales del grupo. No obstante, el entrenador es realista sobre las dificultades que esto implica, especialmente en términos económicos y logísticos, pero mantiene un espíritu optimista y combativo.

Finalmente, Sendarrubias aprovechó para agradecer el apoyo incondicional de los aficionados y de la comunidad local. La unión y el respaldo que ha recibido el equipo por parte de su entorno son, para él, fundamentales no solo para los logros alcanzados sino también para enfrentar los desafíos futuros que implica esta nueva etapa en la División de Honor. El técnico anticipa que, si bien el camino por delante estará lleno de obstáculos, el compromiso y la pasión por el deporte serán claves para superarlos.

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