En una ceremonia celebrada este martes en la Catedral de Ciudad Real, monseñor Abilio Martínez asumió oficialmente su posición como obispo de la diócesis. El acto contó con la presencia de diversas personalidades, entre ellas, el presidente de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, quien ofreció sus mejores deseos al nuevo líder espiritual.
«Es un momento de especial relevancia para nuestra provincia», expresó Valverde, destacando la importancia de esta nueva etapa pastoral para la comunidad. Manifestó su confianza en que monseñor Martínez contribuirá a construir un futuro más justo y solidario en la provincia, la cual se caracteriza por su arraigada tradición católica.
Valverde subrayó la importancia de la empatía hacia las tradiciones y la religiosidad popular que definen a Ciudad Real. Abogó porque el nuevo obispo valore y comprenda las manifestaciones de fe impulsadas por las hermandades locales, fundamentales para promover una sociedad más justa.
Además, el presidente dedicó palabras de gratitud al obispo saliente, monseñor Gerardo Melgar, reconociendo su labor pastoral durante los últimos nueve años. Valverde agradeció su dedicación y entrega a la provincia, deseándole lo mejor en su nueva etapa de vida.
Monseñor Abilio Martínez, en su homilía de inicio del ministerio episcopal, hizo un especial reconocimiento a «María Santísima, estrella de la nueva evangelización». Invocó a la Virgen del Prado para guiar y fortalecer a la comunidad de la iglesia local, aspirando a que se convierta en una comunidad viva, fraterna y misionera.
Este evento marca un nuevo capítulo para la diócesis, con expectativas renovadas y un compromiso renovado con los valores de fe y cohesión social en Ciudad Real.
Fuente: Diputación de Ciudad Real