La Diputación de Guadalajara Invertirá 599.747 Euros en Asfaltar 41 Núcleos de Población

El Plan de Asfaltado de la Diputación de Guadalajara contará con 599.747 euros y llegarán a 41 núcleos de población

La Junta de Gobierno de la Diputación de Guadalajara ha dado luz verde a la ejecución del Plan de Asfaltado 2024, con una dotación de 599.747 euros destinados a la mejora de las vías en 41 núcleos de población de la provincia. Esta iniciativa permitirá la aplicación de 4.005 toneladas de mezcla bituminosa para cubrir 42.000 metros cuadrados de calles municipales.

La financiación del proyecto corre principalmente a cargo de la Diputación, que asume el 86,9% del coste total con 521.278 euros, mientras que el 13,1% (78.468 euros) proviene de las administraciones locales participantes, cada una según su tamaño y población. Los pueblos con menos de 250 habitantes deberán aportar tan solo el 12% del valor de las obras.

Los trabajos de mejora de las superficies de rodaje están programados para tres zonas bien diferenciadas de la provincia: la zona de Molina y Cifuentes, la de Cogolludo y Sigüenza y la zona de Guadalajara. Cada área abarcará un número determinado de poblaciones y, una vez adjudicados los contratos y completado el acta de replanteo, las obras tendrán un semestre para concluir.

En la demarcación de Molina y Cifuentes, 18 pueblos recibirán un presupuesto asignado de 242.594,35 euros, todos ellos con menos de 250 ciudadanos. La mejora llegará a poblaciones como Anchuela del Campo, Establés, entre otros.

Por otro lado, la zona de Cogolludo y Sigüenza contempla inversiones por valor de 247.835,59 euros, dirigidas a 16 localidades. En este apartado, destaca Espinosa de Henares, que al contar con más de 500 habitantes, su participación en la financiación aumenta al 22%.

Finalmente, la zona de Guadalajara se verá beneficiada con una inversión de 109.317,21 euros, que se repartirá entre siete poblaciones, de las cuales cuatro cuentan con menos de 100 habitantes y tres rondan los 300.

El Plan de Asfaltado es una iniciativa que arrancó en 2021 y ha sido sostenida en años sucesivos, orientada a los municipios pequeños con menos de 5.000 habitantes. El objetivo es renovar las calles de relevancia para el tráfico habitual dentro de los cascos urbanos y aquellas que sirven de conexión con infraestructuras esenciales como cementerios, instalaciones deportivas, almacenes de agua y zonas de aterrizaje, proporcionando así mejoras significativas en la calidad de vida y seguridad de los habitantes de estas localidades.

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