El Partido Popular y Vox han dado luz verde este viernes a los primeros presupuestos de la coalición que conforman en la Diputación Provincial de Ciudad Real, ascendiendo a 148 millones de euros para el año 2024. Estos presupuestos, que superan en dos millones de euros lo presupuestado por el PSOE el año anterior, establecen como prioridades la lucha contra la despoblación y el apoyo a los 102 ayuntamientos de la provincia en sus inversiones municipales.
El vicepresidente económico de la Diputación de Ciudad Real, Adrián Fernández, señaló que las cuentas están diseñadas para enfrentar los «tres grandes males» de la región: despoblación, desempleo y carencias en el sector turístico. Durante la sesión plenaria, en la que los diputados del Grupo Socialista votaron en contra, Fernández enfatizó el compromiso de «ejecutar al 100%» el presupuesto, centrando esfuerzos en fijar la población y promover el medio rural.
Destacan dentro del presupuesto asignaciones para combatir la despoblación, con inversiones como 1,5 millones de euros para el arreglo de caminos rurales, 7,8 millones para rehabilitación de carreteras, nueve millones para el Plan de Obras municipales, y dos millones destinados a rehabilitar bienes de interés cultural y para el lanzamiento de un plan de aldeas.
En cuanto a la creación de empleo, se han presupuestado 6,8 millones de euros para financiar un plan de empleo conjuntamente con la Junta y otros 4,5 millones para un plan de empleo propio que será implementado por la Diputación.
El presidente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, agradeció el apoyo de Vox, a pesar de que el partido había mostrado su descontento semanas atrás, acusando al PP de haber elaborado el presupuesto de manera «unilateral». Aun así, Valverde destacó que los presupuestos tienen como fin apoyar los intereses de la provincia y atender las necesidades planteadas.
Por otro lado, el Grupo Socialista, a través de su portavoz José Manuel Bolaños, criticó los presupuestos calificándolos de «trampantojo». Bolaños argumenta que se trata simplemente de una reproducción de políticas socialistas precedentes, pero con un impacto menor y renombradas para simular innovación. Además, instó al gobierno de PP y Vox a aprovechar la «buena herencia» dejada por los anteriores gobiernos en términos de saneamiento financiero.
Finalmente, las enmiendas propuestas por el PSOE, que ascendían a 5,1 millones de euros, fueron rechazadas por los miembros de PP y Vox en la Diputación.