Las recientes inundaciones en Valencia muestran las carencias en la respuesta a eventos climáticos extremos
La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que azotó Valencia en octubre ha sacado a luz significativas deficiencias en la capacidad de respuesta frente a emergencias climáticas de gran magnitud. Aunque la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) había lanzado advertencias desde el 23 de octubre, indicando que el 29 sería el día de mayor riesgo, las acciones de las autoridades locales y regionales no fueron las adecuadas, dejando a la población en una posición de notable vulnerabilidad. Este retraso en las reacciones institucionales ha puesto de manifiesto la falta de medidas preventivas y sistemas de alerta temprana eficientes.
El día crítico, con datos alarmantes sobre el incremento del caudal en la rambla del Poyo en Riba-roja, las alertas a la ciudadanía no se emitieron sino hasta horas después, contribuyendo a una situación de desamparo entre los residentes. Muchas personas se vieron sorprendidas por la intensidad de las lluvias, resultando atrapadas por el agua sin previo aviso. A esto se sumó la confusión creada por las declaraciones del president Carlos Mazón, que apuntaban a un posible desvío de la tormenta, pronóstico que se demostró erróneo y que exacerbó el caos en localidades como Utiel y Requena.
Horas de caos y desinformación aumentaron los riesgos
El flujo constante de información oficial contradictoria y el retraso en activar las alertas de emergencia agravaron la situación, haciendo que los mensajes de alerta en redes sociales precedieran a las comunicaciones oficiales. Cuando finalmente se declaró la alerta de nivel 2 pasadas las 19:00, los equipos de emergencia ya estaban desbordados, dejando un saldo de desastre en numerosas calles y viviendas. Este episodio subraya la urgencia de desarrollar un sistema de gestión de crisis más robusto y una mejor coordinación entre las distintas administraciones y servicios de emergencia para garantizar una reacción ágil y eficaz en situaciones de riesgo climático.
