La DANA deja un saldo de 10 edificios seriamente dañados en Letur, según el análisis del personal técnico de la Diputación

Personal técnico de la Diputación de Albacete ha identificado al menos diez edificaciones gravemente dañadas en Letur tras el devastador paso de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), un fenómeno meteorológico que ha generado fuertes precipitaciones en la región.

Los equipos de emergencia, integrados por bomberos de la Diputación de Albacete, efectivos del Mando de Operaciones Especiales del Ejército de Tierra, agentes de GEACAM, unidades de la Guardia Civil, Unidades Cinológicas de la UME y Protección Civil, están trabajando en conjunto con el fin de localizar a personas que aún no han sido encontradas tras el evento climático.

El presidente de la Diputación de Albacete se ha hecho presente en la zona afectada para supervisar las labores de rescate y ofrecer detalles sobre los operativos en curso. Según sus declaraciones, se ha desplegado una Unidad de Rescate Acuático en el río Segura, una Unidad de Rescate en Altura y una Unidad de Rescate en Estructuras Colapsadas del SEPEI.

La situación es particularmente grave en las calles Moreras, Aurora, Barranco y Garrobo, donde las viviendas han sido las más afectadas por la riada generada por la tormenta.

Beatriz López Núñez, jefa del Servicio de Proyectos y Planes Provinciales de la Diputación de Albacete, en conjunto con el arquitecto provincial Juan Antonio Jiménez Torrente, ha inspeccionado las zonas afectadas, presentando un informe sobre los «efectos devastadores» del fenómeno natural. Se reporta que la crecida súbita del arroyo ha arrasado con todo en su camino.

Además de los esfuerzos físicos en las labores de rescate y recuperación, la burocracia también juega un papel fundamental. Se han realizado informes y decretos de alcaldía que permiten iniciar las operaciones de derribo y reconstrucción con la debida seguridad y eficacia.

El presidente ha agradecido la labor incesante de los voluntarios y ha recalcado la necesidad de que las operaciones sean realizadas por profesionales, sobre todo en las zonas de mayor riesgo. Se ha mencionado que algunas calles aún permanecen inaccesibles, lo que sugiere que el número de edificaciones afectadas podría aumentar a medida que se realicen más inspecciones.

Las labores de rescate se están llevando a cabo con extremo cuidado para evitar daños adicionales a las estructuras ya comprometidas. El acceso a las áreas afectadas está restringido únicamente al personal autorizado. Además, se está monitorizando el estado de los edificios afectados de manera continua para prevenir más colapsos durante las intervenciones.

Las autoridades siguen instando a la población a obedecer las instrucciones de los cuerpos de seguridad y emergencia y a mantener lejos de las estructuras dañadas a fin de salvaguardar la integridad de todos en las zonas afectadas.

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