La nueva Corporación municipal en el Ayuntamiento de Guadalajara, conformada por PP y Vox, ha anunciado que congelará todos los impuestos y tasas municipales a excepción del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). El IBI pasará del 0,46 al 0,54, y se establecerá un nuevo sistema de fraccionamiento en el pago de este impuesto en tres plazos y sin intereses.
El segundo teniente de alcalde y concejal de Hacienda, Alfonso Esteban, ha justificado esta subida del IBI por el «agujero de nueve millones de euros» que tiene el Ayuntamiento en el presupuesto de 2023, cuando gobernaba en el Consistorio el socialista Alberto Rojo.
Según Esteban, esta subida supondrá unos 10 u 11 euros más al mes para los ciudadanos que estén sujetos al sistema especial de pagos en nueve cuotas, aproximadamente 100 euros al año. Aunque reconoce que no es una medida deseada, afirma que es «absolutamente imprescindible» para garantizar el pago a quienes prestan servicio al Consistorio.
El concejal de Economía explica que un informe del órgano de gestión presupuestaria del Ayuntamiento revela que para el ejercicio de 2024 podría haber un déficit notable de ingresos, lo cual pondría en peligro los compromisos asumidos y las necesidades existentes. También menciona que existen ingresos previstos en el presupuesto de 2023 que aún no han sido liquidados y que no deberían contabilizarse en la planificación.
Esteban enfatiza que esta decisión no se debe a un aumento de gastos voluntarios, sino a la responsabilidad de garantizar los servicios públicos y mejorar algunos de ellos. Reconoce que la situación es preocupante y culpa a los gobernantes anteriores por dejar unas cuentas «totalmente desestructuradas».
El Ayuntamiento también aplicará ajustes en los gastos voluntarios, sin afectar a los servicios, y ha tenido que asumir cerca de cuatro millones de euros en revisiones de facturas dejadas por el anterior equipo de Gobierno que estaban sin reconocer.
Para aliviar la carga fiscal de los vecinos, se permitirá el fraccionamiento del pago del IBI en tres meses y sin intereses, siempre que no estén sujetos al sistema especial de nueve cuotas. Además, se incrementará la bonificación del 5% en la última cuota hasta un máximo de 150 euros y se reducirá la cuota de fraccionamiento de los tributos municipales de 30 a 20 euros.
Por otro lado, se implantará una bonificación en el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras de hasta el 95% para autónomos y microempresas que realicen obras vinculadas a la implantación, siempre que la inversión supere los 30.000 euros y en función del número de empleos.
En resumen, la nueva Corporación municipal en el Ayuntamiento de Guadalajara ha decidido congelar los impuestos y tasas municipales, excepto el IBI, para hacer frente al déficit presupuestario y garantizar los servicios públicos. Aunque esta subida del IBI supondrá un aumento en la carga fiscal para los ciudadanos, se implementarán medidas para aliviar el pago y se bonificarán obras vinculadas a la implantación de autónomos y microempresas.
