Un artículo del profesor de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Juan Carlos de la Flor Gutiérrez ha sido publicado en la revista ‘Liño’, donde reconstruye el proceso de profesionalización turística del cabildo de la Catedral de Toledo en el primer tercio del siglo XX. En su investigación, el profesor destaca la apertura del museo catedralicio como un hito pionero en el turismo español, resaltando el papel fundamental que desempeñó la ciudad de Toledo en los inicios de esta actividad.
El estudio de De la Flor Gutiérrez se basa en los estatutos del cabildo de 1926 y en el análisis de las noticias relacionadas con el turismo entre 1900 y 1936 en los libros de actas capitulares. A través de esta revisión retrospectiva, el profesor ofrece un panorama completo de la gestión museística y turística de la Catedral de Toledo, destacando que la implementación de este proceso generó diversos desafíos que enriquecieron la experiencia y el aprendizaje del cabildo. Estos beneficios repercutieron positivamente en el templo y su patrimonio catedralicio, alejándose así de las dificultades económicas surgidas de la Desamortización y la supresión del diezmo.
Según el profesor, «Toledo desempeñó un papel fundamental en los inicios del turismo en España, ya que fue propicio para la promoción del turismo cultural por parte de la incipiente administración turística pública». Señala además que la catedral tuvo un lugar central y preeminente en este itinerario histórico, y muchas de las prácticas turísticas que se observan en la actualidad, como la venta de recuerdos, postales, guías y entradas, así como la gestión de itinerarios y la instalación museográfica, tuvieron su origen entre 1900 y 1936.
El artículo destaca que la profesionalización turística del cabildo comenzó como un experimento para mejorar la situación económica de la institución, pero gracias a la experiencia adquirida a través de diversas dificultades y reclamaciones de los visitantes, se convirtió en una solución económica de gran éxito. Los beneficios obtenidos se destinaron al fondo de alhajas, lo cual tuvo un impacto directo en el patrimonio catedralicio.
Donde las ayudas estatales no llegaron, el efecto positivo de este fondo se hizo evidente, permitiendo la renovación del templo, avances en tecnología, limpieza, múltiples reparaciones y restauraciones. Gracias a estas mejoras, la Catedral de Toledo, pionera en la apertura de museos catedralicios, se consolidó como uno de los principales destinos turísticos ofrecidos a visitantes nacionales e internacionales, que en tiempos recientes han llegado a sumar alrededor de un millón al año.
En conclusión, el artículo de Juan Carlos de la Flor Gutiérrez revela el importante papel que desempeñó la Catedral de Toledo en los inicios del turismo en España, destacando el carácter pionero de la apertura del museo catedralicio. La profesionalización turística del cabildo tuvo un impacto significativo en la economía de la institución y en el enriquecimiento del patrimonio catedralicio, convirtiendo a la catedral en uno de los principales atractivos turísticos del país.
