Las obras de rehabilitación de la Casa de la Cultura de Ciudad Real, situada en los Jardines del Prado, progresan de manera efectiva desde su inicio en mayo. Este proyecto tiene como finalidad restaurar la imagen original del edificio, diseñada por el célebre arquitecto Miguel Fisac, y transformarlo en un espacio accesible y multifuncional, con la previsión de concluir en 2026.
El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, junto al concejal de Obras, Miguel Hervás, y el arquitecto municipal, Emilio Velado, realizaron una visita este miércoles para verificar el avance de las obras. Este proyecto ha sido adjudicado a la empresa Cotodisa, con un coste de 1,7 millones de euros y un plazo de ejecución de 18 meses.
El concejal de Obras, Miguel Hervás, destacó que este proyecto pone fin a una década de incertidumbre relacionada con el edificio, que se encontraba cerrado desde 2010. La rehabilitación comenzó formalmente en 2014, tras la cesión del espacio por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Hervás subrayó que, después de varios intentos fallidos y propuestas que no se materializaron, este equipo de Gobierno ha logrado poner en marcha la rehabilitación integral que devolverá a Ciudad Real uno de sus edificios más emblemáticos.
Las obras incluyen la eliminación de elementos que se añadieron en intervenciones previas, los cuales afectaron tanto la estética como la funcionalidad del edificio, como rampas, escaleras y cerramientos. Además, el diseño contempla la incorporación de nuevos accesos, ascensores y espacios adaptados, con el objetivo de garantizar la accesibilidad universal, manteniendo la coherencia con el diseño original de Fisac.
Entre las áreas que se recuperarán, se encuentran el salón de actos, varias salas polivalentes y los patios interiores, los cuales habían sido parcialmente ocupados por instalaciones y estructuras que alteraban su propósito inicial. Hervás indicó que el edificio no se destinará a un único uso, sino que se convertirá en sede de diversas actividades culturales, educativas y turísticas, con proyectos ya preparados desde las áreas de Cultura, Turismo y Educación.
Por su parte, el arquitecto municipal, Emilio Velado, destacó la importancia de esta intervención, ya que la Casa de la Cultura es la única obra de Fisac en la ciudad. Se han llevado a cabo estudios históricos y arqueológicos para recuperar los valores esenciales de su arquitectura. Uno de los elementos emblemáticos que se reinstalará es la escalera de caracol original, un símbolo de la arquitectura orgánica que caracterizó el trabajo de Fisac. Además, se han eliminado las dos plantas que fueron añadidas al torreón del archivo, y se están recuperando detalles originales, como las hornacinas diseñadas para las luminarias, que permanecían ocultas tras falsos techos.