En un 15 de agosto atípico en Quintanar de la Orden y tras honrar a la patrona, la Virgen de la Piedad con diversos actos religiosos en su honor, la Banda Sinfónica Municipal, dirigida por Sebastián Heras, ponía el broche de oro a este día grande para la localidad que este año se ha visto truncado por las circunstancias sanitarias.
Se trataba de un concierto homenaje a las víctimas del Covid-19 que tenía lugar en la Plaza del Ayuntamiento con todas las medidas de higiene, seguridad y protección establecidas y que ha estado presidido por el alcalde del municipio, Juan Carlos Navalón, concejales del equipo de Gobierno y el concejal de Unidas Podemos; así como los miembros de la Hermandad-Mayordomía de la Virgen de la Piedad y Cristo de Gracia.
Antes de iniciarse el concierto los presentes, en pie, han guardado un minuto de silencio en señal de respeto por todas las personas fallecidas a causa de la pandemia.
Después, el alcalde, Juan Carlos Navalónha tomado la palabra y ha manifestado que el mejor regalo que se le podía hacer a la patrona en este año tan diferente, era este concierto dedicado precisamente a todas las personas fallecidas por culpa de la pandemia. “Es una noche de recuerdo de todas las personas que nos abandonaron de forma tan abrupta aunque siguen ahí, con nosotros, enviándonos un mensajes de cordura y de calma”. En ese sentido, Navalónha indicado que es importante cuidarnos y cuidar de los demás cumpliendo las normas sanitarias y, aunque adoptando en una actitud positiva, no caer en alarmismos ni en conflictos innecesarios con los demás. Por ello ha pedido respeto a la ciudadanía recordando que le virus sigue ahí y que hay que tener precaución, cautela y responsabilidad, porque nadie quiere más víctimas.
El primer edil deseaba a todos los presentes disfrutar del concierto, de actos como este donde se toman las medidas de seguridad necesarias y aprovechaba para felicitar a la Banda Municipal por su trabajo. “Sois ejemplo de colaboración y actitud positiva ante las adversidades”, ha afirmado.
Por su parte, el presidente de la Hermandad-Mayordomía, Francisco Añover también ha dirigido unas palabras a los asistentes haciendo referencia a la pandemia que tanto daño está haciendo a nivel mundial. Añoverha querido recordar al verano de 1885 cuando llegó el cólera y en el municipio se tomaron todas las precauciones que aconsejaron, celebrándose misas rogativas y novenas gozando el pueblo de Quintanar de salud. De ahí que se le regalara a la patrona un manto llamado el del cólera para recordar esa efeméride y agradecerle su intersección por el pueblo.“Estamos repitiendo la historia y por eso hemos tenido que tomar medidas y no se han podido realizar algunos de los actos muy a nuestro pesar pero por el bien de todos” ha dicho.
“Se han ido con la Covid-19 muchos y muy buenos, aquellos que forjaron parte de nuestro pueblo, los que tras la Guerra Civil arrimaron el hombro y levantaron Quintanar y no nos vamos a olvidar de ellos” ha manifestado Añover.
Asimismo ha mandado un mensaje de consuelo de parte de la Parroquia y de la Hermandad-Mayordomía para todos los familiares de los fallecidos.
Por otro lado, ha recordado también a los colectivos a lo que se ha reconocido en las novenas de la Virgen “que han sido un ejemplo de valores religiosos, cívicos y morales de nuestra sociedad y que son la mejor razón para tener en Quintanar esperanza porque si todos arrimamos el hombro Quintanar volverá a ser el centro de la comarca” ha concluido.
Tanto el alcalde como el presidente de la Hermandad-Mayordomía concluyeron con vítores a la Virgen de la Piedad.
A continuación ha dado comienzo el concierto que se iniciaba con un pasodoble al que le siguieron diferentes piezas que hicieron las delicias de los asistentes que sin duda disfrutaron de la música al aire libre.