Esta mañana el CEIP Dulcinea del Toboso de Ciudad Real ha acogido en el Pabellón Príncipe Felipe el mercadillo solidario a favor de Ucrania, al que la alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, ha asistido para apoyar la causa. Un día que ha estado plagado de actividades en el centro, como talleres de manualidades, de lectura, pintura, gymkanas o actuaciones, entre otras. Hoy se han movilizado en torno a 200 niños y niñas, incluyendo a dos niños ucranianos que recientemente han sido acogidos y que se han incorporado al centro.
Esta mañana el CEIP Dulcinea del Toboso de Ciudad Real ha acogido en el Pabellón Príncipe Felipe el mercadillo solidario a favor de Ucrania, al que la alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, ha asistido para apoyar la causa. Un día que ha estado plagado de actividades en el centro, como talleres de manualidades, de lectura, pintura, gymkanas o actuaciones, entre otras. Hoy se han movilizado en torno a 200 niños y niñas, incluyendo a dos niños ucranianos que recientemente han sido acogidos y que se han incorporado al centro.
La primera edil ha felicitado a la directora y a los profesores por su implicación en este tipo de actividad. “En los centros educativos no solo se aprenden conocimientos, sino también valores. Esta es una fiesta para compartir, para la convivencia y, en definitiva, para adquirir esos valores tan importantes para la sociedad”. Masías también ha aprovechado para dar la bienvenida a los niños acogidos recién escolarizados, animando a que se sigan realizando este tipo de actividades solidarias en los centros educativos de Ciudad Real.
El afán es sobre todo transmitir la solidaridad a los más pequeños, cómo de importante puede resultar la ayuda a personas que están lejos y que están inmersos en situaciones tan difíciles como la que Ucrania atraviesa actualmente. “Profesores, padres y alumnos han colaborado con mucha ilusión para poder ayudar al pueblo de Ucrania con su granito de arena”, ha manifestado la directora del colegio, Ana Beatriz Sebastián.
Los beneficios irán destinados a la entidad solidaria Cáritas Diocesana, desde donde gestionarán y distribuirán las ayudas que llegarán hasta Ucrania. Rosa Rodríguez, representante de la ONG, ha manifestado su alegría por la iniciativa puesta en marcha. “Es una labor con la que sensibilizamos a los más pequeños, que son las generaciones que vienen por detrás que darán continuidad a la labor que estamos realizando hoy en día”, ha expresado la portavoz, añadiendo que “actualmente hay 12 millones de personas en Ucrania que dependen de estas ayudas”.
