En una conferencia de prensa celebrada en Buenos Aires, el presidente electo de Chile, José Antonio Kast, expresó su respaldo a una posible intervención de Estados Unidos en Venezuela, argumentando que la situación en ese país amerita una respuesta internacional debido a lo que él califica como una «narcodictadura» bajo el liderazgo de Nicolás Maduro. Kast hizo hincapié en que, aunque Chile no tiene la capacidad para intervenir directamente, apoyaría cualquier acción que pusiera fin a lo que considera una dictadura que afecta la estabilidad de toda la región.
Kast también subrayó la necesidad de un acuerdo internacional para abordar el problema venezolano, señalando que las elecciones en el país caribeño carecen de legitimidad y que es crucial que los organismos internacionales reconozcan esta realidad. Además, criticó a Maduro por su negativa a permitir el retorno de migrantes venezolanos, argumentando que el mandatario prefiere que se queden en el extranjero y envíen remesas en lugar de permitir su regreso.
En el contexto de su campaña, Kast ha defendido una serie de medidas estrictas en materia de inmigración y seguridad, incluyendo la construcción de muros en las fronteras y la expulsión de migrantes irregulares. La propuesta de un «corredor humanitario» para facilitar el regreso de migrantes a sus países de origen se suma a su enfoque en abordar lo que considera una crisis regional derivada de la situación en Venezuela.
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