El Gobierno de Castilla-La Mancha ha manifestado su satisfacción tras el acuerdo alcanzado entre el PP y el PSOE para la reforma de un nuevo Estatuto de Autonomía. Desde el Ejecutivo regional se destaca el «clima especial» que se respira en la región en comparación con la situación política nacional, mostrando confianza en que la nueva normativa se tramitará con agilidad en el Congreso de los Diputados.
Minutos después de que se anunciara el acuerdo, el vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, compareció en la sala de prensa del Parlamento autonómico, donde subrayó la importancia del nuevo texto. «Estamos muy satisfechos porque tenemos un documento que puede servir perfectamente para las dos próximas generaciones. Será un Estatuto de nueva generación que recoge los derechos de la ciudadanía y garantiza los servicios públicos», afirmó Guijarro, quien también destacó la incorporación de nuevas herramientas de gestión, como el decreto ley y la inteligencia artificial, así como la posibilidad de asumir nuevas competencias.
El vicepresidente destacó que ha primado «el sentido común», señalando que hubiera sido difícil explicar a la ciudadanía que un nuevo Estatuto del siglo XXI no se hubiera materializado por motivos exclusivamente electorales. «Los grupos han sido hábiles a la hora de buscar una fórmula», añadió.
La Proposición de Ley del nuevo Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha será llevada al Pleno de las Cortes y, posteriormente, al Congreso de los Diputados para su aprobación como proposición de ley, lo que culminará en una ley orgánica. Guijarro enfatizó que, dado el acuerdo entre los dos grupos en las Cortes, no hay obstáculos para que el nuevo Estatuto sea ratificado en el Congreso, donde ambos partidos cuentan con la mayoría necesaria.
El vicepresidente también resaltó la «autonomía» del PSOE en Castilla-La Mancha y el respaldo del PP, lo que, en su opinión, no debería impedir la tramitación rápida de la norma, aunque dejó claro que se aceptarán enmiendas por parte de otros grupos políticos.
Además, Guijarro indicó que, como parte del acuerdo, las elecciones programadas para el último domingo de mayo de 2027 se llevarán a cabo con la actual horquilla de entre 25 y 35 diputados. Una vez que se implemente la nueva horquilla, a partir de 2028, se podrá modificar la ley electoral para ajustar el número de diputados en las Cortes de Castilla-La Mancha entre 25 y 55.
Por último, mencionó que el acuerdo introduce «una mayoría reforzada de tres quintos» para cualquier futura modificación de la ley electoral, lo que obligará a que cualquier propuesta de cambio también obtenga el respaldo de dicha mayoría. «Este acuerdo garantiza que, una vez que se apruebe la próxima ley electoral, cualquier modificación deberá contar con el apoyo de tres quintos», concluyó Guijarro.