Junta defiende su gestión 2016-2020 como «rigurosa y responsable» ante las críticas de PP y Vox en la presentación de cuentas

Junta defiende las cuentas 2016-2020 como fruto de su gestión "rigurosa y responsable" frente a críticas PP-Vox

El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha defendido las cuentas generales de la Comunidad Autónoma entre 2016 y 2020, periodo en el que se gestionaron 43.000 millones de euros. Ruiz Molina destacó que esta gestión fue «rigurosa, seria y responsable», contrastando con las críticas de los grupos parlamentarios del PP y Vox, que calificaron la administración como «opaca y desastrosa».

Durante su intervención en el Pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha, en el debate sobre los dictámenes de la Comisión de Economía y Presupuestos, Ruiz Molina recordó que no se aplicaron recortes como en la administración de Cospedal, resaltando las contribuciones al desarrollo económico sin aumentar la presión fiscal, y la reducción del déficit y la deuda pública. También subrayó el esfuerzo de los empleados públicos en atender las necesidades de la ciudadanía durante la pandemia.

El consejero hizo referencia a los informes del Tribunal de Cuentas, que auditó las cuentas y concluyó que hubo una correcta rendición de cuentas, cumpliendo con los principios contables y procedimientos presupuestarios. Destacó que Castilla-La Mancha fue la tercera comunidad autónoma en reducir su deuda en relación con el Producto Interior Bruto, y que la ejecución presupuestaria alcanzó el 93%.

El ponente designado de la Comisión de Economía, Fernando Mora, reafirmó que la gestión fue «correcta y sin infracciones», gracias a la labor de la Intervención General y del cuerpo de interventores. Sin embargo, el grupo de Vox, a través del diputado Francisco José Cobo, criticó la supuesta «opacidad» en la rendición de cuentas, argumentando que se debatían cuentas de 2016 sin funcionalidad actual, señalando problemas como el aumento de deuda pública y la gestión precaria.

El Partido Popular, por su parte, expresó su descontento con el proceso de debate, considerando que el tiempo dedicado no era suficiente para analizar adecuadamente las cuentas. El diputado Santiago Serrano lamentó que las cuentas reflejan una gestión caracterizada por el «déficit y la deuda», citando un elevado número de infracciones y modificaciones de crédito.

Fernando Mora, portavoz del grupo socialista, defendió el cumplimiento de los plazos de presentación de cuentas y mencionó que esta etapa finaliza, abriendo paso a la creación de la nueva Cámara de Cuentas de Castilla-La Mancha, que promete ser una administración más «ágil, cercana, versátil y transparente».

Scroll al inicio