El temporal asociado a la borrasca ‘Juliette’ ha congelado los termómetros este lunes y martes, que de madrugada han bajado hasta los -16ºC en Molina de Aragón (Guadalajara) y ha dejado más de un metro de nieve en Baleares, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), que señala que estos valores son más de 10 grados inferiores a los normales aunque pronostica que poco a poco las temperaturas comenzarán a ascender de manera progresiva a partir de este miércoles.
El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, ha destacado que Juliette, con su aire muy frío, ha dejado registros «significativos», como en Molina de Aragón (Guadalajara) donde llegaron en la madrugada del martes a -16ºC, que es una temperatura 13 grados más fría de lo normal para la época. En el sistema Ibérico bajaron a -11ºC en Calamocha (Teruel) y a -10ºC en Daroca (Zaragoza). Se trata de valores unos 11 grados más bajos de lo normal. En el resto de las zonas las heladas han sido de entre -4 y -7ºC más bajas de lo normal.
«Ha sido una noche muy fría para encontrarnos a las puertas de la primavera meteorológica», ha comentado Del Campo, que ha añadido que la nieve también apareció incluso en zonas costeras de la mitad norte como San Sebastián, el Mediterráneo, la costa de Tarragona o la ciudad de Barcelona.
De hecho, indica que en Barcelona la de este lunes fue la nevada más intensa desde marzo de 2018 y en la costa de Tarragona también hay que remontarse cinco años atrás, hasta 2018.
Asimismo califica de «muy destacables» las nevadas registradas este lunes en Baleares, donde la cota estuvo en solo cien metros y en algunos puntos del norte de Mallorca se acumularon espesores superiores a 1 metro en 24 horas a partir de los 800 metros de altitud. «Es una nevada extraordinaria», afirma.
A las nevadas se sumaron en esas zonas vientos muy intensos durante la madrugada del martes pues en Baleares se superaron los 117 kilómetros por hora, como en Capdepera (Mallorca). También soplaron vientos intensos en las en zonas montañosas de la Península, como en el Alto del León (Madrid) donde se han superado los 105 kilómetros por hora.
En lo que respecta a este martes, último día del invierno meteorológico, el portavoz de la AEMET pronostica que seguirá la situación adversa en el archipiélago balear, pues seguirá nevando en el norte de Mallorca, pero la cota de nieve empezará a subir a últimas horas del día hasta los 900 o 1.000 metros.
Por debajo de esa altura lloverá con intensidad y con granizo y, en todo el archipiélago seguirá soplando el viento con mucha fuerza, ya que el portavoz avisa por rachas de más de 90 kilómetros por hora y habrá olas en el archipiélago que podrán superar los 8 metros, por lo que la AEMET ha avisado por riesgo extremo de fenómenos costeros.
En cuanto a la Península, el portavoz subraya que soplará viento fuerte en el nordeste y las nevadas irán cayendo en cotas muy bajas del tercio norte, donde se podrán acumular de dos a cinco centímetros de nieve e incluso puntualmente algo más a partir de 400 o 500 metros en las comunidades cantábricas norte de Castilla y León, Navarra y La Rioja.
Las temperaturas diurnas subirán en todo el país y el ascenso será notable en el este de la Península. No obstante, en muchos puntos del norte no pasarán de 6 a 8 grados centígrados.
Respecto al primer día de la primavera meteorológica, el portavoz de la AEMET avisa de que arrancará con valores realmente frías, con mínimas muy bajas, inferiores a los ocho o diez grados bajo cero en zonas de montaña y probablemente también en puntos de páramos del centro.
Las heladas serán generalizadas en el interior algo que Del Campo considera que esto es ya poco frecuente a comienzos de marzo, con temperaturas entre 5 y 10 grados centígrados por debajo de lo normal para la época.
En la mayor parte de la Península, las temperaturas máximas también serán frías e incluso pueden bajar en el centro por lo que avisa de que en «pocas áreas» de España, sobre todo de la mitad norte, superarán los 8 o 10 grados de temperatura máxima.
Las nevadas aparecerán por encima de los 200 metros o puntualmente incluso por debajo de esa altura en el este de Galicia, interior de Asturias, interior de Cantabria, norte de Castilla y León y tampoco se descartan en cotas bajas del País Vasco y norte de Navarra.
Al mismo tiempo, podría haber chubascos en Levante y todavía en Baleares, con una cota de nieve que se situará en esa zona en torno a 500 o 600 metros.
En la misma línea, la madrugada del jueves será de nuevo muy fría, con valores similares a los del día anterior. En general, aunque las temperaturas diurnas comenzarán a subir poco a poco, irán recuperando los valores normales para la época, por lo de cara al fin de semana se alcanzarán las temperaturas máximas propias de la climatología.
Sin embargo, las temperaturas nocturnas continuarán bajas, con heladas que, aunque irán perdiendo intensidad, se seguirán produciendo en amplias zonas del interior y serán todavía fuerte en zonas de montaña.
En general las mínimas seguirán unos cinco valores por debajo de lo normal en zonas del centro y norte de la Península, con un ambiente frío de madrugada durante toda la semana y bueno, ya lo iremos comentando.
De ese modo, la amplitud térmica del día a la noche será amplia el fin de semana, con máximas superiores a 20ºC en zonas de Castilla y León, Castilla-La Mancha y Aragón.
Finalmente, respecto a las precipitaciones, el portavoz de la AEMET pronostica que la segunda mitad de la semana será en general seca, con muy pocas precipitaciones y, como mucho, alguna débil en el Cantábrico oriental y algún posible chubasco aislado en Baleares y en el área mediterránea.
(EUROPA PRESS)
