En un reciente llamado a la transparencia y la legitimidad electoral, Josep Borrell, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, ha instado nuevamente al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela a hacer públicas las actas electorales, advirtiendo sobre la potencial crisis política que enfrenta el país sudamericano. Durante su participación en el curso ‘Quo Vadis Europa?’ en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en Santander, Borrell expresó su preocupación por la negativa del gobierno venezolano a validar los resultados electorales ante la comunidad internacional.
Borrell subrayó que, sin una verificación independiente de los resultados electorales, la comunidad internacional no puede reconocer la victoria que proclama Maduro. Esta actitud, según el diplomático europeo, amenaza con sumir a Venezuela en una crisis política de gran envergadura. A pesar de las «palabras cariñosas» que Maduro ha tenido para él en el pasado, Borrell mantiene una postura firme sobre la importancia de la verificación como base para la aceptación de los resultados. Según información aportada por la oposición, existe una discrepancia significativa entre los resultados anunciados por el oficialismo y lo que sugieren más del 80% de las actas reunidas por esta.
En medio de esta controversia, se ha producido un llamado irónico de Maduro al Tribunal Supremo de Venezuela para que intervenga en su defensa, una solicitud que Borrell califica de sarcasmo, dadas las competencias claramente delineadas del Tribunal, que no incluyen la contabilización de votos. A este panorama se suma el incremento de detenciones, superando las 2.000 personas, y una creciente represión que preocupa tanto a observadores internacionales como a entidades de derechos humanos.
En el terreno de las soluciones potenciales, Borrell reveló que se han propuesto varias iniciativas en las negociaciones en curso, incluida una propuesta por parte de un país latinoamericano para una repetición electoral y un compartimiento del poder entre el gobierno y la oposición. No obstante, estas opciones permanecen en el aire, pendientes de cualquier pronunciamiento del Tribunal Supremo venezolano.
Esta insistencia de Borrell por la transparencia y la legitimidad electoral en Venezuela subraya la importancia de estos principios para la estabilidad política del país y refleja el compromiso de la comunidad internacional por buscar una salida negociada y democrática a la crisis en Venezuela. La situación se mantiene en observación, mientras tanto la comunidad internacional espera y exige un gesto de buena voluntad por parte del gobierno de Nicolás Maduro.