Javier Ortega, actual secretario de Organización de CCOO Castilla-La Mancha, ha anunciado su intención de presentar candidatura para suceder a Paco de la Rosa como Secretario General del sindicato en la región. Esta decisión se hace pública en el marco del XI Congreso de CCOO, que se llevará a cabo en Toledo los próximos 15 y 16 de mayo, bajo el lema ‘Organizar, movilizar, transformar. Nuevos retos, misma lucha’.
Ortega comunicó su decisión tanto al secretario de la Confederación, Unai Sordo, como al propio Paco de la Rosa, así como a otros secretarios generales y a las secretarías generales de las diversas estructuras del sindicato, recibiendo un respaldo significativo en sus intenciones. En sus declaraciones, el número dos de CCOO Castilla-La Mancha enfatizó su deseo de que su candidatura sea un proyecto de consenso, manifestando su interés en que se vea representada la pluralidad y las diversas estructuras del sindicato.
El candidato anunció que, aunque su intención es la de articular una única candidatura, las normas del sindicato permiten que otras personas puedan postularse para la Secretaría General, lo que fomenta la posibilidad de una competencia abierta. Ortega expresó su compromiso a trabajar en la configuración de una propuesta para una nueva comisión ejecutiva regional, que será elaborada en los próximos meses, y se mostró convencido de que el sindicato cuenta con una variedad de personas capaces de asumir estas posiciones.
Con respecto a la situación actual de CCOO Castilla-La Mancha, Ortega destacó que el sindicato llega al congreso en una posición favorable, con una representatividad del 43%, 64.870 afiliados y más de 5.048 delegados sindicales. Subrayó que más del 50% de estos delegados son nuevos, lo que indica una renovación significativa en la representación sindical, donde muchos de ellos son jóvenes y mujeres, lo que representa un avance importante en la diversidad dentro de la organización.
Ortega, quien aún ocupa la posición de número dos en CCOO Castilla-La Mancha, también hizo hincapié en los retos que la nueva dirección deberá abordar, centrándose en la necesidad de reflexionar sobre el futuro del sindicalismo en la región y su papel como defensor de valores democráticos, igualdad y libertad en un contexto social cada vez más polarizado.
Por último, anunció que presentará una propuesta política durante el congreso que intentará marcar las líneas de trabajo del sindicato para los próximos cuatro años, reafirmando así su compromiso con un sindicalismo que aporte «certezas» a las personas trabajadoras y devuelva el sentido de pertenencia a esta clase social a través de modelos participativos.