De pasar a ser una promesa en la cantera del Barça a convertirse en una esperanza en el ataque del equipo bermellón. El delantero vilasarense comienza ganarse el cariño y el respeto en la afición mallorquinista
El extremo Jan Virgili se ha sumado a las filas del RCD Mallorca esta temporada como uno de sus cinco fichajes, y su impacto ya se siente en el estadio de Son Moix. A pesar de haber jugado solo tres partidos desde el banquillo, su habilidad y determinación han captado la atención de Jagoba Arrasate, quien empieza a confiar más en este joven talento catalán.
Aunque el equipo no pudo llevarse la victoria ante el Espanyol, Virgili mostró una entrega notable al disputar 45 minutos. En su última aparición contra el Atlético, se destacó como asistente en un gol, lo que generó aplausos que resonaron en el estadio, recordando la euforia que compartieron los aficionados por el gol de Vedat Muriqi. Su estilo de juego ha empezado a ser comparado con el del surcoreano Kang-in Lee, quien dejó una huella importante en el Mallorca antes de su traslado al PSG.
Jan Virgili: La gran baja en Son Moix
No obstante, la afición bermellonista enfrenta una noticia menos positiva. El progreso prometedor de Virgili se ve interrumpido, ya que ha sido convocado para representar a España en el Mundial Sub-20, lo que lo mantendrá alejado del equipo hasta finales de octubre. El delantero ya se encuentra concentrado y partirá hacia Chile donde jugará su primer partido el 28 de septiembre contra Marruecos, seguido de encuentros frente a México y Brasil. Su ausencia podría plantear un desafío significativo para las aspiraciones del Mallorca en las próximas semanas.

















