En la reciente sesión del Consejo Rector del Patronato Deportivo Municipal, el grupo municipal de Izquierda Unida-Podemos votó en oposición al pliego de privatización del contrato de limpieza y servicios varios para las instalaciones deportivas municipales. A pesar de su voto en contra, el pliego fue aprobado con los votos a favor del Partido Popular (PP) y VOX, mientras que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) también manifestó su desacuerdo alineándose con Izquierda Unida.
La formación de Izquierda Unida critica que en la propuesta se han antepuesto los criterios económicos sobre la calidad del servicio. Además, señalan la carencia de evaluaciones específicas para cada una de las instalaciones, dejando en manos de la empresa concesionaria estas decisiones y desentendiéndose el Patronato de una responsabilidad clave, tal como se extrajo de una nota de prensa de la organización.
Además, Izquierda Unida ha puesto el acento en la falta de detallamiento sobre cómo se asignarán los 55 trabajadores que serán subrogados y en la no inclusión de una revisión de precios dentro del contrato. Esto podría derivar, según afirman, en una dotación de personal insuficiente en las instalaciones y en la no garantía de unas condiciones laborales adecuadas.
El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento, Txema Fernández, ha puesto como ejemplo la posición de ‘Jardinero General’, calificando su carga horaria y condiciones de «rozar la esclavitud», destacando una extenuante jornada laboral de 1988,5 horas anuales que incluiría trabajar de lunes a domingo, en horarios de mañana y tarde.
Fernández también ha criticado la ineficiencia y el gasto redundante del contrato, ya que se incluyen servicios como albañilería, pintura y jardinería, entre otros, para los que el Ayuntamiento ya dispone de personal capacitado. Según su punto de vista, se está incurriendo en un «derroche» al pagar nuevamente por estos servicios a la empresa adjudicataria.
El portavoz ha remarcado la omisión en el pliego de ciertas instalaciones como el circuito de cross de la pista de atletismo del Polígono o el pabellón del CEIP ‘San Lucas’ en el Casco. Esto sugiere que el contrato sigue siendo una extensión del anterior, sin considerar nuevas necesidades o instalaciones, no direccionándose hacia el beneficio de los usuarios y usuarias del Patronato Deportivo Municipal (PDM), sino más bien hacia la entidad adjudicataria.
El contrato, valorado en un total de 3.173.011 euros (IVA incluido), también incluye el mantenimiento y limpieza de estadios de césped natural y artificial en el Salto del Caballo, utilizados exclusivamente por una Sociedad Anónima Deportiva lucrativa costeada por el público toledano. Fernández también ha anunciado que las instalaciones deportivas de Santa Bárbara serán igualmente privatizadas.
Finalmente, Izquierda Unida ha criticado la ambigüedad del contrato en cuanto a políticas medioambientales, señalando su falta de integración con los espacios verdes adyacentes y su permisividad hacia el uso de glifosato, un herbicida con riesgos contrastados para la salud por la Organización Mundial de la Salud.
