Hace unos días tuvo lugar una agresión homófoba en el municipio de Argés, en Toledo. Tras un conflicto en un bar de la localidad, los agresores, aprovechando la tardanza de la Guardia Civil y que la víctima quedaba indefensa en el suelo, lanzaron una serie de amenazas e insultos claramente homófobos. Desde ALEAS IU-CLM se condena este hecho violento y quedan a completa disposición de la víctima.
Por otro lado, la formación manifiesta que este suceso no es, ni mucho menos, un caso aislado, ya que durante los últimos años se han incrementado el número de delitos de odio hacia las personas LGTBI+, comportamientos que atentan directamente contra la diversidad, la pluralidad y la propia democracia.
Estos delitos vienen amparados por un discurso de odio que se manifiesta en distintos espacios y que está siendo impulsado por representantes políticos de ultraderecha a través de hostiles declaraciones en los medios de comunicación.
En este sentido, ALEAS IU-CLM evidencia que el problema de los delitos de odio radica, además, en que son difíciles de contabilizar. No por su naturaleza, sino porque desde las administraciones públicas no se ha estructurado un mecanismo de conteo. Se puede conocer el número de denuncias, como la realizada por el vecino argeseño, pero nunca los casos reales. De hecho, muchas agresiones lgtbifobas no llegan a materializarse en una denuncia, por lo que no suman al cómputo global.
Aunque algunas asociaciones LGTBI+ intentan paliar esta dramática solución, la respuesta sólo se puede encontrar en un organismo público dirigido desde la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, La Comisión Regional de delitos de odio.
El Ayuntamiento de Argés nunca se ha posicionado a favor de las personas LGTBI+
La Asamblea Local de IU de Argés ya denunció en diciembre la realización de unas ponencias en las que se invisibilizaba la realidad de la diversidad en las familias, defendiendo un modelo católico, tradicional y heteronormativo como única opción familiar. La ocultación de la diversidad aúpa a los discursos de odio porque lo que no se nombra, no existe. En este mismo sentido, el Ayuntamiento de Argés nunca se ha posicionado a favor de las personas LGTBI+, ni siquiera este pasado 17 de mayo, Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia. Por otro lado, la oposición municipal y muy especialmente Izquierda Unida llevan denunciando las carencias de seguridad ciudadana del municipio desde hace años. Las medidas del alcalde del PP, Jesús Guerrero, han consistido en negar la necesidad de aumentar la plantilla de agentes amparándose en las responsabilidades de la Guardia Civil, un cuerpo en el que no tiene competencia como alcalde de un municipio. En Argés solo hay policía hasta las 14:00 horas, lo que hace plantearse la duda de que si hubiera habido una pareja de agentes de la Policía Local probablemente la agresión homófoba en el aparcamiento cercano se hubiera podido evitar.