Hoy, dirigentes, afiliados y simpatizantes de Izquierda Unida Toledo y del Partido Comunista de España (PCE) han llevado a cabo una conmemoración del Día de la República en el Patio 42, un evento en el que han hecho un llamado a fomentar «una política de paz» en contraste con las tendencias belicistas que, según ellos, se están extendiendo a nivel global. Durante la celebración, expresaron su deseo de que el 14 de abril sea declarado como día festivo en España y criticaron al Ayuntamiento por priorizar la memoria histórica de figuras como los reyes Godos en detrimento de los miles de ajusticiados que yacen en los Patios del Cementerio Municipal de Toledo.
El coordinador local de IU y portavoz municipal en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, ha denunciado que el actual Gobierno, encabezado por el PP y Vox, ha eliminado las partidas destinadas a la memoria democrática, alegando que sus esfuerzos están dirigidos a proporcionar lo que consideran un «entierro digno» para los reyes Godos. Fernández subrayó que esta decisión es inaceptable, dado que quienes realmente merecen dignidad son aquellos que lucharon por la democracia y que han sido olvidados por los partidos de derecha y ultraderecha.
Fernández lamentó la falta de inversiones en los últimos años para dignificar los cinco patios del cementerio, insistiendo en que es crucial recordar a aquellos compatriotas que han sido olvidados por la historia, en contraposición a un enfoque que favorece a figuras históricas que, en su opinión, no deberían recibir una atención tan prioritaria.
Por su parte, Jorge Vega, coordinador provincial de Izquierda Unida en Toledo y secretario general del PCE en Castilla-La Mancha, ha reiterado la importancia de que el 14 de abril sea reconocido como una fecha festiva a nivel nacional. Resaltó que cualquier defensor de la Constitución debería abogar por la celebración de este día, que conmemora la eliminación de la República tras un golpe de Estado que instauró una dictadura franquista.
Vega también se refirió a la reciente propuesta de la derecha y ultraderecha para eliminar la Ley de Memoria Histórica en Extremadura, advirtiendo sobre las graves consecuencias que esto podría acarrear y expresando solidaridad con los afectados en esa comunidad.
Finalmente, en medio de un panorama bélico en diversas partes del mundo, Fernández hizo hincapié en que el artículo 6 de la Constitución de 1931 sigue vigente, el cual establece la renuncia a la guerra como un principio de política nacional. En este contexto, instó a continuar promoviendo una política de paz, un compromiso que Izquierda Unida ha mantenido desde su fundación en 1986.
