El portavoz de Izquierda Unida-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, ha registrado un total de nueve alegaciones al proyecto de ordenanzas fiscales para el año 2025. Fernández ha destacado que el Ayuntamiento se encuentra nuevamente sujeto a las reglas fiscales y que los informes técnicos revelan la necesidad de ingresar cuatro millones de euros para lograr el equilibrio financiero.
El portavoz ha manifestado que el proyecto de ordenanzas fiscales pone de manifiesto, «casi sin sorpresa», un «espíritu cobarde», argumentando que la mayor carga fiscal recaerá sobre quienes más lo necesitan. A su juicio, los ingresos que se generen deben destinarse a atender las necesidades de los ciudadanos de Toledo, y no a satisfacer los «caprichos u obligaciones» del equipo de Gobierno local.
Entre las principales alegaciones, Fernández ha incluido propuestas para modificar las ordenanzas del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). En este sentido, solicita un recargo del 50% a las viviendas desocupadas durante dos años, del 100% a las que llevan tres años vacías y hasta del 150% para propietarios de múltiples viviendas en el mismo municipio. “Estos propietarios tienen la responsabilidad de garantizar mayor ingreso porque pueden hacerlo”, ha subrayado.
Además, propone ampliar las actividades sujetas al factor de cobro positivo del 0,60%, incluyendo no solo oficinas, industrias y comercios, sino también espectáculos, ocio, hostelería, gimnasios y edificios religiosos con fines educativos y asistenciales.
Respecto a la ordenanza reguladora del control y ordenación del estacionamiento de vehículos, Txema Fernández ha presentado enmiendas relacionadas con la tasa a los autobuses turísticos y la nueva zona Magenta. Propone suspender la tasa hasta que se debata la ordenanza de movilidad y reclama que la zona Magenta mantenga un importe mínimo fraccionado de 0,40 euros, considerando que su aplicación podría resultar discriminatoria para quienes acuden a hospitales en esa área.
En cuanto a la tasa de basuras, el portavoz ha alertado de que no es necesario realizar modificaciones en este momento, ya que no se puede garantizar un cobro individualizado. Critica que el nuevo sistema de tasas no sea ni progresivo ni proporcional, lo que perjudica a las familias con menos recursos.
Finalmente, Izquierda Unida ha cuestionado la rebaja lineal en la Tasa por Actividad Municipal de Control de la Apertura de Establecimientos Industriales, sugiriendo que este tipo de medidas son injustas. En este sentido, propone la inclusión de nuevos tramos de tasas que mantengan las cotas anteriores en proporción a los metros cuadrados y la implementación de una tasa por contaminación.
Txema Fernández ha calificado al equipo de Gobierno de «cobarde» por no tocar impuestos que podrían generar ingresos significativos, como el Impuesto de Actividades Económicas o el Impuesto de Construcción, Instalación y Obras, así como por la falta de modificaciones a la tasa por ocupación de subsuelo, suelo y vuelo de la vía pública, que está sin actualizar desde 2020.