El Grupo Municipal Izquierda Unida-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo ha expresado sus preocupaciones este jueves respecto a la implementación de la tasa a los autobuses turísticos en la ciudad. Según el concejal Txema Fernández, la demora en la aplicación de esta tasa, que debería haberse puesto en marcha el 1 de marzo, podría provocar una crisis de ingresos para el Consistorio.
Fernández ha señalado que, además de la tasa a los autobuses turísticos, no se han puesto en marcha ni la zona magenta de Safón ni la zona del Hospital de Toledo. Esta situación, según sus cálculos, podría generar una falta de ingresos de alrededor de 253.000 euros en el actual ejercicio económico. El concejal ha indicado que los informes técnicos de los presupuestos municipales advertían sobre la necesidad de ingresar cuatro millones de euros, por lo que la falta de ingresos de estas tasas previstas podría causar un «grave desequilibrio presupuestario», dado que más de 1,5 millones estaban vinculados a las modificaciones de la ordenanza de movilidad que incluyen estas tasas.
Fernández también ha expresado su preocupación por la falta de infraestructuras y de personal que aseguren el cobro de la tasa a los autobuses que lleguen a Toledo. A pesar de la fecha anunciada, no se han iniciado las obras ni se ha dotado de personal suficiente para implementar esta norma, lo que complica la posibilidad de hacerla efectiva.
El concejal ha puesto en duda el inicio de la aplicación de la tasa tras recibir rechazos de entidades del sector, como la Asociación Nacional de Empresarios de Transportes en Autocares (Anetra). Además, ha criticado que la información disponible en la web municipal, que incluye los lugares habilitados para las paradas y un audio con los trámites de pago, no es suficiente para garantizar la efectividad de la tasa.
Fernández ha señalado que, aun si los turoperadores logran realizar los trámites y el pago, no existe un control adecuado que asegure que los autobuses cumplan con esta obligación. Asimismo, ha cuestionado las medidas a adoptar para sancionar a los vehículos que incumplan la normativa y estacionen en lugares no autorizados.
Por último, el concejal ha reiterado el rechazo del Grupo Municipal Izquierda Unida-Podemos al establecimiento de zonas magenta, argumentando que representan una «injusticia» y que su único objetivo es recaudatorio.