En una escalada de violencia que pone fin a dos meses de tregua, Israel lanzó en la madrugada del martes lo que se describe como el mayor ataque contra Gaza desde el comienzo del alto el fuego, dejando un saldo de al menos 244 muertos. Bajo las órdenes del Primer Ministro Benjamín Netanyahu, se ejecutaron «amplios ataques contra objetivos terroristas» pertenecientes a Hamás, en lo que la oficina de Netanyahu defendió como una respuesta a la «reiterada negativa» de Hamás de liberar a los rehenes en su poder.
Los bombardeos, que tuvieron como objetivo numerosos puntos del enclave, incluyendo escuelas y zonas humanitarias que servían de refugio a civiles, han generado una ola de repercusiones tanto a nivel local como internacional. Hamás acusó a Netanyahu de sabotear el acuerdo de cese al fuego y advirtió sobre el peligro que ahora corren los rehenes.
La acción, justificada por Israel como un esfuerzo para presionar a Hamás, ha sido metida en contexto con la reciente decisión de Netanyahu de despedir al director del Shin Bet, lo que ha provocado protestas y críticas por parte de la oposición y de la fiscal general del Estado. En medio de estos eventos, la población israelí ha mostrado su descontento y preocupación, tanto en protestas en las calles como en una acampada en Tel Aviv, exigiendo avances para la liberación de los secuestrados.
La violencia renovada pone de manifiesto las complejidades en la búsqueda de una solución duradera para la paz en la región y plantea interrogantes sobre la efectividad y las consecuencias de las tácticas militares y políticas empleadas. Mientras Israel argumenta la necesidad de una postura firme contra Hamás, las elevadas cifras de víctimas y el impacto sobre los civiles palestinos plantean críticas y preocupaciones a nivel internacional sobre la proporcionalidad y la moralidad de tales acciones.
La comunidad internacional, aún recuperándose de la noticia del reinicio de las hostilidades, espera ansiosamente los desarrollos futuros, mientras la situación en Gaza y las decisiones de Israel continúan dominando los titulares globales. Con la situación evolucionando rápidamente, el mundo mantiene su atención sobre la delicada y volátil dinámica entre Israel y Gaza, esperando soluciones que puedan llevar finalmente a una paz sostenible.