En una reciente aparición en el programa de Telecinco, ¡De viernes!, Isa Pantoja compartió detalles desgarradores sobre un episodio de su vida que ha capturado la atención de la audiencia española. En un giro de eventos que sigue generando controversia, las acciones de su familia, especialmente las de su madre, la famosa cantante Isabel Pantoja, han vuelto a ser el centro de una intensa discusión mediática.
Durante la entrevista, Isa Pantoja describió un incidente particularmente alarmante donde, tras descubrirse que tenía un teléfono móvil privado y había recibido a un amigo en casa sin permiso, su madre, visiblemente enojada, recurrió a cortarle el pelo con unas tijeras de cocina como forma de castigo. Este acto, realizado en presencia de un amigo de la cantante y su hermano Agustín, ha sido descrito por muchos como un acto de humillación.
El conflicto escaló cuando, después de este castigo, Isa intentó refugiarse en su habitación, momento en el que Isabel llamó a su hijo mayor, Kiko Rivera, quien llegó a la residencia familiar, Cantora, en cuestión de minutos. Según Isa, su hermano comenzó a forzar la puerta del baño donde se había resguardado, llegando al punto de agredirla físicamente en su búsqueda del teléfono móvil.
El punto álgido del enfrentamiento llegó con el llamado episodio de la «manguera», en el que, bajo instrucciones de su hermano, Isa se vio forzada a quedarse en ropa interior en pleno mes de diciembre, mientras era rociada con agua fría. Este acto contó con la inicial presencia de su madre, quien, según Isa, optó por abandonar la escena alegando no poder soportar la vista, dejándola en manos de su hermano.
Isa, visiblemente emocionada durante la entrevista, compartió cómo en ese momento de desesperación, sólo anhelaba que el conflicto cesara, llegando a perder la percepción del frío y el dolor. Afortunadamente, fue su tío Agustín quien intervino, poniendo fin a la agresión y ayudándola a recuperarse.
La polémica en torno a este incidente ha sido exacerbada no sólo por la gravedad de los hechos, sino también por las dudas planteadas por Raquel Bollo, también vinculada a la familia Pantoja, quien cuestionó la versión de Isa Pantoja durante su participación en el mismo programa la semana anterior. Este cruce de relatos ha alimentado un debate público y mediático sobre los límites del castigo familiar y la exposición mediática de conflictos internos.
La entrevista de Isa Pantoja en ¡De viernes! no sólo ha reavivado el interés en las dinámicas familiares de los Pantoja, sino que también ha encendido una discusión más amplia sobre la violencia doméstica y el abuso emocional, temas de relevancia social y cultural en España y más allá.