La Guardia Civil de Yeste ha procedido a la investigación de una mujer, residente en Hellín y de 33 años, por ser la presunta autora de un crimen de usurpación de identidad. La sospechosa logró contratar diversas líneas de telefonía móvil suplantando la identidad de otra persona.
Este caso se desveló tras la denuncia de un ciudadano de Yeste quien, al solicitar un préstamo bancario, descubrió que le había sido denegado por figurar en un registro de morosos. Este registro reflejaba una deuda acumulada de 5.673 euros que el denunciante no reconocía.
Resultó que la deuda era el resultado de la contratación fraudulenta de líneas de telefonía móvil. Alguien había usado telefónicamente los datos personales del denunciante sin su consentimiento para formalizar varios contratos con distintas compañías de telefonía.
A lo largo de la investigación policial, la Guardia Civil recopiló pruebas suficientes que apuntaban a una familiar cercana del afectado, la cual, se confirmó, había efectuado las gestiones como si fuera el denunciante. Para evitar que le llegaran las facturas a la verdadera víctima, la investigada proporcionó un número de cuenta bancaria inexistente.
Consecuentemente, las facturas no pagadas por el uso de estas líneas telefónicas elevaron la suma debido a llamadas realizadas de manera extensiva.
El delito en cuestión, tipificado en el artículo 401 del Código Penal vigente, podría acarrear una pena de prisión que oscila entre seis meses y tres años.
Finalmente, la Guardia Civil de Yeste ha remitido todas las diligencias al Juzgado de Instrucción número 2 de Hellín, que se ocupará de la prosecución del caso.
