El Gobierno de Castilla-La Mancha ha anunciado la aprobación de un gasto de 100.000 euros para una nueva convocatoria de ayudas enfocadas a los profesionales del taxi. El objetivo principal es promover la adaptación de sus vehículos para asegurar la accesibilidad a personas con movilidad reducida.
El director general de Transportes y Movilidad de la comunidad autónoma, Rubén Sobrino, destacó la relevancia del servicio de taxi como parte integral de la convivencia en las ciudades y el territorio, tanto urbano como interurbano. Sobrino recalcó en un comunicado de la Junta la necesidad de garantizar la universalidad, la accesibilidad y la calidad en la prestación de este servicio. Según sus palabras, las ayudas cubrirán las actuaciones necesarias para la adaptación de los vehículos, y se podrán recibir financiaciones de hasta 9.600 euros por actuación.
Este programa de ayuda no es el primero de su tipo, puesto que ya en 2022 el Gobierno regional habilitó una partida similar de 100.000 euros que se destinó a facilitar a los titulares de licencias de taxi la reforma y adecuación de sus coches para mejorar el acceso de personas con discapacidad.
Dentro de la región de Castilla-La Mancha se contabilizan un total de 1.058 licencias de taxi. De esa cifra, el 30% se distribuye entre las siete grandes ciudades castellanomanchegas, mientras que el resto corresponde a servicios de taxi en zonas rurales. En relación al transporte escolar, se señala que un 40% de las líneas son operadas por profesionales del taxi, evidenciando el papel fundamental que desempeña este gremio en la conectividad del transporte en la comunidad.