La Diputación de Guadalajara ha dado luz verde a la nueva convocatoria de subvenciones ‘Nuestra Tierra, Nuestra Cultura’, que para el año 2024 destinará 40.000 euros con el fin de fomentar la preservación de la cultura autóctona en los municipios y EATIM de la provincia. Este programa se implementará a través de la Escuela de Folklore de la Diputación y tiene como principal objetivo el apoyo económico de actividades formativas y prácticas que ayuden a conservar y revitalizar las tradiciones locales.
Las subvenciones estarán destinadas a financiar una diversidad de cursos incluyendo, entre otros, bailes y danzas tradicionales, encaje de bolillos, cestería, alfarería, esmaltes y azulejería, confección de trajes tradicionales, restauración de mobiliario y objetos típicos, recopilación y práctica de música tradicional, labores textiles, talla en madera, narrativa oral y herrería. Estas áreas cubren un amplio espectro de las manifestaciones culturales típicas de la región, que van desde la artesanía hasta el folclore y la música.
Los costes que podrían ser cubiertos por estas subvenciones, tal como ha informado la Institución provincial mediante comunicado de prensa, incluyen los honorarios de los monitores y, de ser necesario, los gastos de su desplazamiento. La convocatoria detalla que los cursos ofrecidos deben realizarse antes del 31 de octubre de 2024, deben contar con un mínimo de 20 horas lectivas y tener al menos diez participantes.
Para su adjudicación, el programa adopta un enfoque de concurrencia competitiva. Los ayuntamientos y EATIMs que estén interesados en obtener este apoyo económico deberán presentar sus solicitudes a través de la plataforma electrónica de la Diputación en un lapso de 15 días hábiles a partir de la fecha en que se publique el extracto correspondiente en el Boletín Oficial de la Provincia.
El programa ‘Nuestra Tierra, Nuestra Cultura’, en funcionamiento desde 1996, refleja el compromiso continuo de la Diputación con el reconocimiento y fortalecimiento de las raíces culturales como motor del desarrollo comunitario. Además de preservar las tradiciones, este programa busca fomentar la actividad y vivacidad en los pueblos de la región y crear espacios para el encuentro y la convivencia de sus habitantes.