En un giro inesperado que ha cautivado a la audiencia española, Belén Esteban irrumpió en ‘La revuelta’ para defender vehementemente a Lalachus y David Broncano de las críticas y comentarios negativos que habían surgido en su contra. Conocida por su espontaneidad y su carácter directo, Esteban no dudó en tomar la palabra para pronunciar un contundente «¡Basta ya!», poniendo fin a las habladurías y defendiendo la labor de sus compañeros en el especial de las campanadas de la Puerta del Sol, que este año rompió récords de audiencia para RTVE.
El evento, que había congregado a 5,9 millones de espectadores frente a sus televisores, se convirtió en el centro de atención cuando Lalachus y Broncano compartieron anécdotas y detalles exclusivos de una noche que ya es histórica. Entre las revelaciones, destaca el ingenioso y espontáneo saludo que ambos hicieron a Cristina Pedroche y Alberto Chicote, presentadores de las campanadas en Antena 3, generando un momento de humor que, aunque luego se disculparon, demostró el ambiente festivo y amistoso entre cadenas.
La preparación meticulosa de la emisión también fue un tema destacado, con Lalachus revelando su perspectiva proactiva y el esfuerzo conjunto con RTVE para innovar en la presentación visual de las campanadas. Este esfuerzo culminó en una producción que incluso sorprendió positivamente al equipo encargado, según las propias palabras de la cómica.
Sin embargo, el ambiente distendido y humorístico no se limitó a los presentadores, ya que una broma de Grison sobre el vestido de Cristina Pedroche introdujo un tono jocoso que no tardó en ser moderado por Broncano. Este comentario vuelve a poner de manifiesto el icónico vestido de Pedroche, conocido este año por su original confección con leche materna, una elección destinada a enviar un mensaje de concienciación sobre la protección de los menores y la infancia.
Con esta actuación, ‘La revuelta’ ha demostrado ser un espacio de entretenimiento capaz de reunir a figuras públicas de diversos entornos, utilizando el humor y la camaradería como ejes centrales. Pero más allá de las risas y los buenos momentos, ha sido también un escenario donde se han defendido valores como el respeto y la solidaridad, como lo demostró Belén Esteban con su firme intervención para proteger a sus compañeros de las críticas injustificadas, reafirmando su papel como una de las figuras más queridas y respetadas del panorama televisivo español.