En un intento por mitigar la creciente crisis de hacinamiento en las cárceles, el Gobierno británico ha anunciado la liberación anticipada de 1.100 presos en Inglaterra y Gales, medida que entra en vigor a partir de este martes. Esta decisión se suma al esfuerzo continuo por gestionar la saturación carcelaria que actualmente afronta el sistema penitenciario del país.
Este nuevo grupo de liberaciones es parte de un plan más amplio, impulsado por el Partido Laborista liderado por el primer ministro, Keir Starmer, siguiendo una promesa hecha tras su triunfo electoral en julio. Es importante destacar que la medida excluye a los individuos condenados por delitos violentos, incluyendo agresiones sexuales, violencia doméstica y casos de terrorismo, con el fin de asegurar que la seguridad pública no se vea comprometida.
Este anuncio llega después de que, en septiembre, otros 1.750 prisioneros se beneficiaran de una iniciativa similar, lo que refleja la urgencia del gobierno por aliviar la presión sobre un sistema penitenciario al borde del colapso. La decisión de liberar anticipadamente a los prisioneros se da a conocer en momentos en que funcionarios penitenciarios advierten sobre la falta crítica de espacio, una situación exacerbada por un crecimiento anual en la población carcelaria de alrededor de 4.500 personas.
La medida se aplica a aquellos que han cumplido al menos el 40% de sus condenas y busca no solo aliviar la saturación en las instalaciones carcelarias sino también fomentar la rehabilitación. Muchos de los que han sido seleccionados para la liberación provienen de prisiones abiertas, demostrando un compromiso con su proceso de reintegración a la sociedad.
La población carcelaria en Inglaterra y Gales había alcanzado un número récord de 88.521 personas en septiembre, en gran medida debido al encarcelamiento de individuos acusados de participar en los disturbios violentos ocurridos en agosto, protagonizados por grupos de extrema derecha en diversas ciudades del país.
La situación de las prisiones en el Reino Unido ha sido motivo de preocupación durante varios años, destacando la necesidad de encontrar soluciones sostenibles para el manejo de la población carcelaria. La liberación anticipada de presos se presenta como una medida paliativa en respuesta a una problemática mucho más profunda que requiere de un enfoque integral y a largo plazo para su resolución.
