Francisca de Pedraza, una mujer valiente y pionera en la denuncia de la violencia de género en el siglo XVII, ha sido homenajeada con la inauguración de una rotonda en Guadalajara. Este acto, celebrado entre las avenidas Pálmaces de Jadraque y Mercedes Gaibrois, se enmarca en los esfuerzos por visibilizar la lucha contra la violencia hacia las mujeres, un problema que persiste hasta el siglo XXI.
La inauguración contó con la presencia de la alcaldesa de Guadalajara, Ana Guarinos, quien subrayó la importancia de la figura de Pedraza y del acto en sí. Durante su intervención, Guarinos hizo un llamado a la unidad en la lucha contra la violencia de género, enfatizando que “seamos una sola voz clamando justicia.” Reconoció la necesidad de priorizar a las víctimas sobre cualquier planteamiento ideológico en esta crucial causa social.
La regidora también recordó la histórica sentencia dictada en 1624 por el entonces rector de la Universidad de Alcalá, Álvaro de Ayala, que marcó un precedente al reconocer el derecho de una mujer a obtener el divorcio, la devolución de su dote y una orden de alejamiento de su maltratador. Esta intervención de la universidad, según Guarinos, fue un hito en la lucha contra la violencia hacia las mujeres.
Guarinos lamentó que los datos actuales sobre violencia de género sigan siendo alarmantes y reafirmó que la lucha no debe ser un tema de ideologías, sino una realidad social que debe abordarse de forma unitaria. La alcaldesa insistió en que la causa debe unir y no dividir, subrayando que las mujeres continúan enfrentándose a amenazas, agresiones y asesinatos.
Carmelo García, vicerrector de la Universidad de Alcalá en el Campus de Guadalajara, también hizo acto de presencia en la inauguración y destacó la importancia de Francisca de Pedraza en la historia de los derechos humanos y su papel en la lucha contra la violencia de género. García agradeció al Ayuntamiento no solo por la inauguración de la rotonda, sino también por su compromiso con actos programados durante el año que fomentan la igualdad y el respeto.
Finalmente, el vicerrector destacó que la rotonda representará un símbolo permanente de este compromiso: “cada persona que pase por ella tendrá la oportunidad de recordar la importancia de la igualdad y la justicia y de que ninguna lucha por los derechos humanos es en vano.” Así, el homenaje a Francisca de Pedraza se erige como un recordatorio de la necesidad de seguir luchando por un futuro libre de violencia.
