En la provincia de Cuenca, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha reconocido la importancia de la formación inicial en materia de Protección Civil, destacando que es fundamental para desempeñar las labores de atención y coordinación en urgencias y emergencias. En este sentido, se han entregado diplomas a 18 voluntarios y voluntarias de Protección Civil que han completado con éxito el XXI Curso de Formación Básica en la provincia.
El viceconsejero de Administración Local y Coordinación Administrativa, Eusebio Robles, ha agradecido el trabajo y compromiso de los participantes, resaltando la labor impagable que realizan como aliados de los servicios de urgencias y emergencias, así como de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Además, ha destacado la importancia de la implicación de jóvenes voluntarios en garantizar la continuidad de las agrupaciones en los municipios y ciudades de la región.
En la provincia de Cuenca, hay un total de 446 voluntarios distribuidos en 27 agrupaciones, mientras que en toda Castilla-La Mancha son 4.227 voluntarios de 245 agrupaciones. Los participantes que han recibido sus diplomas provienen de municipios como Barajas de Melo, Cañete, Cuenca, Iniesta, Las Pedroñeras, Las Valeras y Tarancón, y han completado un curso de 420 horas de duración.
Estas agrupaciones son consideradas imprescindibles para los ayuntamientos, ya que desempeñan un papel fundamental en la gestión de eventos y emergencias, contribuyendo a mejorar la calidad de vida y el bienestar de los ciudadanos. Por esta razón, el Gobierno de Castilla-La Mancha continúa promoviendo la formación y capacitación de los voluntarios de Protección Civil a través de la Escuela de Protección Ciudadana.
En conclusión, la formación en Protección Civil es un pilar fundamental para garantizar la seguridad y el bienestar de la sociedad, y el reconocimiento a los voluntarios que dedican su tiempo y esfuerzo a esta labor es un gesto de agradecimiento y valoración por parte de las autoridades regionales.