El Ministerio de Igualdad ha tomado la decisión de investigar una denuncia presentada por la Asociación Española contra las Terapias de Conversión ‘No es terapia’, que alega que siete diócesis en España están ofreciendo cursos y talleres destinados a la conversión sexual de personas LGTBI+. Esta denuncia se formalizó ante la Dirección General para la Igualdad real y efectiva de las personas LGTBI+, y se produjo durante una reunión mantenida este miércoles entre la ministra de Igualdad, Ana Redondo, y el presidente de la asociación, Saúl Castro.
Según la denuncia, las diócesis involucradas incluyen Madrid, Getafe, Alcalá de Henares, Barcelona, Sigüenza-Guadalajara, Valencia y Málaga. En respuesta a esta situación, el Ministerio analizará la denuncia para determinar las acciones adecuadas dentro de su ámbito de competencia. Desde el ministerio se ha recordado que la legislación vigente prohíbe claramente cualquier método, programa o terapia que busque modificar la orientación o identidad sexual, estableciendo también sanciones que van desde 200 a 150,000 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción.
La ley incluye sanciones específicas para diferentes tipos de infracciones, siendo las leves sancionadas con multas de 200 a 2,000 euros por la utilización de expresiones vejatorias. Las infracciones graves, como la falta de retirada de estas expresiones de plataformas digitales, pueden ser sancionadas con multas de hasta 10,000 euros. Las infracciones consideradas muy graves, que implican la promoción o práctica de terapias de conversión, conllevan multas que oscilan entre 10,001 y 150,000 euros.
El director general para la Igualdad real y efectiva de las personas LGTBI+, Julio del Valle, subrayó la importancia de abrir un debate social sobre las terapias de conversión, enfatizando los daños psicológicos que estas prácticas pueden causar a las personas LGTBI+, afectando su vida afectivo-sexual.
Por otra parte, las diócesis mencionadas han expresado su oposición a las terapias de conversión. La Archidiócesis de Madrid se alineó con la postura del Vaticano y afirmó no haber recibido ninguna denuncia hasta la fecha. La Diócesis de Getafe, en un comunicado la semana pasada, también rechazó estas prácticas, aclarando que la denuncia incluye charlas sobre conversiones a la fe. Asimismo, el Arzobispado de Barcelona se distanció de tales iniciativas, afirmando su oposición a las terapias de conversión y aclarando que las actividades denunciadas están supuestamente ligadas a empresas privadas sin vínculo con la archidiócesis.