La Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic) de la Guardia Civil de Cuenca ha recibido en los últimos días una de las últimas unidades aéreas no tripuladas (RPA) adquiridas por la benemérita para equipar a distintas unidades y mejorar la capacidad de vigilancia de éstas.
Se trata de un dron que cuenta con un piloto operador titulado, cuyas utilidades puestas al servicio de la Guardia Civil ayudará a las diferentes especialidades del Cuerpo para mejorar sus respectivas operativas, tanto de vigilancia como de investigación.
La RPA adquirida está equipada de la tecnología más avanzada que le permitirá realizar vuelos en ciertas condiciones adversas de cualquier tipo, ya sea de carácter meteorológico, por situaciones sobrevenidas como incendios o accidentes e incluso para volar en la más absoluta oscuridad, ha informado la Guardia Civil en un comunicado.
A su vez está dotada de un sistema de captación de imágenes dual mediante cámara térmica y a través de una cámara visual con zoom de alta resolución que permitirá a los agentes realizar grabaciones y fotografías de gran calidad.
La aeronave que puede ser manejada desde distancias superiores a los seis u ocho kilómetros tiene como otra de sus principales características su versatilidad y flexibilidad, que debido a su reducido tamaño y peso, junto con la rapidez en el ascenso y descenso, la hacen apropiada para el trabajo operativo, ya que su tiempo de puesta en vuelo se reduce a un minuto.
La Guardia Civil espera que este nuevo apoyo tecnológico ayude a especialidades como el Seprona para la vigilancia de espacios de difícil acceso con gran riqueza medioambiental, además como una forma de auxilio en la investigación de incendios, a la vigilancia de las carreteras por parte de la Guardia Civil de Tráfico, a la ayuda en la búsqueda de personas desaparecidas o perdidas en el monte en épocas de recolección de setas, junto a su aporte en labores de investigación de las más diversas tipologías delictivas.