El pleno del Ayuntamiento de Guadalajara ha aprobado este viernes, por unanimidad, el Plan Territorial de Emergencias Municipal (Platemun), un paso fundamental para garantizar la seguridad y protección de los ciudadanos ante situaciones de emergencia y catástrofes. Este plan es un requisito obligatorio para los municipios de más de 20.000 habitantes y ha cobrado especial relevancia en el contexto actual, tras las consecuencias que ha dejado la DANA en diferentes territorios del país hace un mes. El concejal de Seguridad, Chema Antón, ha explicado que el Platemun busca coordinar recursos y medios para labores de prevención y anticipación frente a posibles emergencias, adelantando que ya están trabajando en otros planes, como el radiológico, que también es obligatorio.
Durante el debate, la alcaldesa, Ana Guarinos, dirigió una advertencia a los grupos políticos, especialmente al PSOE, instándoles a no aprovechar la situación ni utilizarla como herramienta política. Guarinos advirtió que si sucediera algo similar a las consecuencias de la DANA en otros lugares, tendrían que rendir cuentas por no haber actuado en su momento. Desde el PSOE, la concejal Pilar Sánchez criticó al gobierno municipal (PP y Vox) por haber mantenido el plan en la «cuneta» durante meses, así como otros planes obligatorios, como el de inundaciones. En respuesta, Guarinos subrayó que su administración ha comenzado a abordar estas cuestiones, mientras que el PSOE tuvo cuatro años sin culminar ningún proyecto similar.
Por otro lado, el grupo Aike mostró su alegría por la aprobación del Plan, aunque su portavoz, Susana Martínez, lamentó que no se hubiera discutido previamente en los Consejos de Participación. Además, cuestionó la falta de un técnico municipal de Protección Civil en el Ayuntamiento, quien debería encargarse de la actualización y mantenimiento del plan ante emergencias.
La sesión plenaria, que se extendió por más de seis horas, también incluyó un homenaje a las víctimas de la DANA y una declaración de Guarinos con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Durante esta lectura, los concejales del PSOE y la única edil de Aike abandonaron la sala. Desde el PP y Vox se lamentó la ausencia de estos grupos en un momento que debería haber sido de unidad, mientras que el PSOE justificó su salida como una protesta ante lo que consideraban una maniobra de distracción por parte de la alcaldesa en relación a un escándalo que involucra al concejal de Igualdad, Narro.
Asimismo, se aprobaron nuevas tarifas para el autobús urbano de Guadalajara, un tema que generó tensiones políticas. La oposición criticó la medida, señalando que representa un «sablazo» para los ciudadanos. El concejal socialista Juan Flores utilizó un lenguaje coloquial para criticar al concejal de Infraestructuras, Santiago López Pomeda, lo que generó un llamado de la alcaldesa para que se moderara en su lenguaje.
Finalmente, fue presentado un proyecto de urbanización para la calle Zaragoza 55, que permitirá la transformación de suelo industrial en urbano y la construcción de más de 400 viviendas, de las cuales 80 tendrán algún tipo de protección. La sesión culminó con la aprobación, por parte de PP y Vox, de una moción para exigir la rehabilitación del Fuerte de San Francisco, que recibió 14 votos a favor y 10 en contra del PSOE.