Greenpeace critica que Castilla-La Mancha tenga el mayor porcentaje de regadíos en España, alcanzando el 36% en términos relativos.

Greenpeace lamenta que C-LM sea la región con mayor porcentaje de regadíos, un 36% en términos relativos

La organización Greenpeace ha expresado su preocupación por el hecho de que Castilla-La Mancha sea la comunidad autónoma con el mayor porcentaje de regadíos en zonas donde se debería reducir el riego de manera prioritaria. En concreto, esta región tiene un 36,1% de áreas tensionadas para el regadío, lo que equivale a casi 120.000 hectáreas, principalmente en la cuenca del Guadiana. Además, Castilla-La Mancha es la comunidad autónoma con mayor extensión de zonas críticas en términos relativos, con un 21,27%. Estas áreas críticas se encuentran principalmente en las provincias de Ciudad Real, Toledo y Cuenca.

Greenpeace considera necesario reducir el volumen de agua destinada al regadío en España y racionalizarlo para lograr una transición hídrica justa que garantice la supervivencia de todos, ya que en la actualidad el agua disponible no es suficiente para mantener todos los regadíos. Eva Saldaña, directora ejecutiva de Greenpeace España, ha presentado el informe «La burbuja del regadío en España», que alerta sobre la insostenibilidad del regadío y resalta las zonas con mayor riesgo.

El informe revela que desde 2004 a 2021, los regadíos «legales» han aumentado en al menos 536.295 hectáreas, y que en total se riegan 3,97 millones de hectáreas en España. Las comunidades autónomas con mayor superficie de regadío son Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Aragón, Comunidad Valenciana, Extremadura, Cataluña y Región de Murcia. Las tres primeras comunidades suman el 56% de todos los regadíos en España.

Greenpeace advierte que España es el segundo país con más estrés hídrico de Europa, ya que el 75% del territorio está en riesgo de desertificación. El 80% del agua disponible en España se utiliza para la agricultura y la ganadería, pero el ahorro en el consumo se centra en el uso urbano e industrial y no en la agricultura. El informe apunta a la concentración del regadío en menos manos y su falta de contribución al fortalecimiento rural.

Teniendo en cuenta la escasez y la mala gestión del agua en España, Greenpeace considera que el regadío es insostenible y propone reducir los regadíos ilegales en las áreas más tensionadas. Además, la organización pide a los partidos políticos que expliquen su política hídrica durante las elecciones generales del 23 de julio y que los ciudadanos exijan un compromiso medioambiental inequívoco a sus dirigentes.

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