La Consejera de Desarrollo Sostenible del Gobierno de Castilla-La Mancha, Mercedes Gómez, ha reafirmado el progreso significativo de la región respecto a la implementación de la Agenda 2030, durante la comisión de seguimiento. Castilla-La Mancha destaca por “cumplir todos los hitos” de la estrategia sostenible y se encuentra entre las cinco comunidades autónomas españolas que han logrado este objetivo junto a Murcia, Galicia, Islas Canarias y Baleares.
Antes de la reunión, Gómez transmitió a los medios que, a pesar de los logros, “todavía queda trabajo por hacer”. Para continuar con el impulso de la estrategia, la región ha delineado cuatro ejes principales y ha implementado 31 medidas específicas.
Uno de los aspectos clave de la estrategia de Castilla-La Mancha es la alineación presupuestaria con los principios de desarrollo sostenible. Hasta el momento, el 94% del presupuesto se ha alineado con los criterios de sostenibilidad, una estrategia reflejada además en la creación de la Red Local 2030, que ya cuenta con la adhesión de un centenar de municipios comprometidos con la aplicación de los objetivos de desarrollo sostenible en la gestión local.
Con el fin de promover un mayor compromiso y participación en la consecución de los objetivos, se han establecido ayudas específicas. Los municipios podrán acceder a ayudas de hasta 125.000 euros destinadas a la formación especializada de su personal y de la ciudadanía, mientras que las asociaciones sin ánimo de lucro involucradas en el ámbito del desarrollo sostenible podrán beneficiarse de ayudas por un valor de 90.000 euros para apoyar sus actividades.
Otras áreas en las que Castilla-La Mancha ha destacado son las políticas de igualdad y las relacionadas con el consumo responsable. Estas iniciativas han sido reconocidas y presentadas como buenas prácticas a nivel europeo ante Naciones Unidas.
La consejera hizo hincapié en la importancia de los indicadores homogéneos que permiten evaluar el cumplimiento regional y la capacidad de influir favorablemente en la política medioambiental para cumplir con los objetivos de la Agenda 2030.
En conclusión, Castilla-La Mancha emerge como un ejemplo de compromiso y liderazgo en materia de sostenibilidad, con una planificación y políticas concretas que conducen hacia el cumplimiento de estándares internacionales y una adopción efectiva de la Agenda 2030.
