El Gobierno de Castilla-La Mancha ha expresado su desacuerdo con las declaraciones de la empresa Ciudad Real International Airport (CRIA) respecto a su intención de actuar en la atención de inmigrantes. La consejera portavoz del Ejecutivo regional, Esther Padilla, ha calificado de «sorprendente» la postura de CRIA, acusándola de intentar «confundir o engañar» a la ciudadanía al presentar sus acciones como humanitarias, cuando en realidad, asegura, están motivadas por intereses comerciales.
En declaraciones a CMMedia, Padilla ha resaltado que la empresa da la impresión de ser una ONG, pero en esencia se trata de un negocio. La portavoz ha señalado que los argumentos expuestos por CRIA son incorrectos al comparar su situación con la del aeropuerto de Barajas, que cuenta con un área específica para la atención de inmigrantes que acuden de forma voluntaria. Por el contrario, ha afirmado que el plan en Ciudad Real implica llevar a inmigrantes a un aeropuerto sin vuelos regulares y potencialmente sin su consentimiento.
El Gobierno regional aboga por una «solución humanitaria» para el acogimiento de inmigrantes, con el presidente Emiliano García-Page sugiriendo que el tema sea discutido en una futura Conferencia de Presidentes Autonómicos. Según Padilla, las propuestas de CRIA no se alinean con estas soluciones, ya que limitarían sus posibilidades de generar beneficios económicos en el aeropuerto.
Además, la consejera ha cuestionado la intención de CRIA al solicitar claridad sobre si la propuesta de acoger refugiados implicaría una compensación financiera del Gobierno de España de 1,3 millones de euros al mes para establecer un centro de inmigrantes en un aeropuerto sin actividad. Este hecho ha suscitado preocupación sobre el verdadero objetivo de la empresa y su compromiso con la situación de las personas inmigrantes.
