El Gobierno de Castilla-La Mancha se ha pronunciado sobre el trágico suceso ocurrido entre Val de Santo Domingo y Alcabón, en Toledo, donde una mujer ha perdido la vida en un presunto caso de atropello. Ante esta situación, las autoridades han pedido cautela hasta conocer los resultados de la investigación y han manifestado su disposición a asumir cualquier responsabilidad que recaiga sobre ellos, especialmente en lo que respecta a los hijos de la fallecida, en caso de confirmarse que se trata de un caso de violencia de género.
La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, ha expresado su pesar por el fallecimiento de esta mujer, sin olvidar que también era madre. Ha resaltado la importancia de esperar los resultados de la autopsia, ya que estos revelarán aspectos clave para el avance de la investigación. Asimismo, ha señalado que la Consejería de Igualdad está atenta y dispuesta a intervenir en caso de ser necesario.
Padilla ha asegurado que la Consejería de Igualdad está colaborando estrechamente con las fuerzas de seguridad del Estado para recopilar toda la información relevante. Además, ha enfatizado la importancia de actuar con prudencia antes de emitir juicios precipitados.
En caso de confirmarse como un caso de violencia de género, se ha recordado que la legislación vigente protege especialmente a los menores que han perdido a sus madres debido a estos actos. La ley aprobada por el Gobierno de Castilla-La Mancha establece un protocolo de atención y protección para estos niños, así como asistencia psicológica a través del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam).
En resumen, el Gobierno de Castilla-La Mancha pide prudencia y espera los resultados de la investigación en el caso de la mujer fallecida en Toledo. Se muestran dispuestos a asumir cualquier responsabilidad y garantizar la protección y apoyo necesarios a los hijos de la víctima, en caso de confirmarse que se trata de un caso de violencia de género.
