El vicepresidente segundo, José Manuel Caballero, ha expresado la satisfacción del Gobierno de Castilla-La Mancha ante la reciente validación de sus posturas por parte de la Unión Europea y los tribunales en relación a temas hídricos. Desde Venecia, donde participa con el presidente regional, Emiliano García-Page, en la Comisión NAT del Comité Europeo de las Regiones, Caballero ha subrayado la importancia de las directivas europeas que exigen la preservación y cumplimiento de los caudales ecológicos.
Durante su intervención, el vicepresidente ha enfatizado la necesidad de asegurar el abastecimiento de agua, un recurso vital, a las comunidades y regiones que lo requieren. Ha mencionado el uso de recursos europeos, como el proyecto de la Tubería de la Llanura Manchega, que garantiza agua en calidad y cantidad a amplias zonas de Ciudad Real, Cuenca, Albacete y Toledo.
Caballero ha considerado fundamental que Castilla-La Mancha mantenga una postura proactiva en Europa para defender sus recursos naturales, particularmente el agua, que ha calificado como estratégico y escaso.
El vicepresidente también ha elogiado la participación constructiva de García-Page en la Comisión de Recursos Naturales, donde se ha discutido el futuro de la agricultura y la nueva normativa sobre vino. Ha destacado la importancia de representar los intereses de la región y ha anunciado la intención de proponer que Castilla-La Mancha sea sede de un encuentro del Comité Europeo de las Regiones, reafirmando el compromiso del Ejecutivo regional en ser una voz activa en las decisiones europeas.
En cuanto a la Política Agrícola Común (PAC), Caballero ha indicado que en las próximas semanas se concretará el panorama para todo el territorio de la UE. Ha resaltado la necesidad de un presupuesto suficiente para apoyar al sector agrario, el cual es considerado estratégico para garantizar la soberanía alimentaria. Esta postura ha sido consensuada con representantes del sector agrario de la región.
Asimismo, el vicepresidente ha resaltado que Castilla-La Mancha es un modelo en la gestión de fondos europeos para el desarrollo rural, destacando el uso eficiente de los fondos Leader que fomentan el desarrollo de comunidades y territorios dinámicos con actividades empresariales diversificadas, contribuyendo en última instancia al crecimiento poblacional.