El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha reafirmado su compromiso con la mejora del sistema educativo en la región, durante la inauguración del VIII Congreso de Educación de Castilla-La Mancha, Exducere, que tuvo lugar en el Palacio de Congresos ‘El Greco’ en Toledo. Este evento ha reunido a cerca de mil docentes de toda la comunidad autónoma, destacando la importancia de su labor.
García-Page enfatizó la necesidad de realizar inversiones en educación, señalando que esta asignación de recursos es “necesaria e indispensable”. En sus comentarios, hizo hincapié en la importancia de establecer prioridades claras, muy por encima de cualquier coyuntura que pudiera poner en riesgo la financiación del sistema educativo. La postura del presidente es que, a diferencia de épocas anteriores, un recorte en este ámbito no sería aceptable.
Además, subrayó que el dilema sobre la incorporación de la tecnología en las aulas no debe existir, reiterando que el sistema educativo no puede permitirse un “analfabetismo tecnológico”. Argumentó que la falta de capacitación en herramientas tecnológicas no solo afectaría a los estudiantes, sino también a la sociedad en su conjunto, intensificando desigualdades.
Asimismo, García-Page recordó que la educación es un deber y una responsabilidad que implica la provisión de servicios adecuados. En este contexto, resaltó que el superávit económico de Castilla-La Mancha garantiza que áreas fundamentales como la educación, la sanidad y las prestaciones sociales estén protegidas de posibles dificultades financieras.
La intervención del presidente concluyó con un agradecimiento a todos los docentes presentes, reconociendo su dedicación y deseando éxito en el desarrollo del congreso, un encuentro que consideró clave para el futuro del sistema educativo en la región.
