El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, advirtió a los separatistas catalanes que la soberanía de España “no es discutible ni troceable”. En este sentido, reiteró que aquello importante para el país “hay que discutirlo entre todos” y ha sido tajante al asegurar que “no vamos a tolerar que detrás de las palabras, y menos aún de una tan hermosa como nación, se puedan esconder privilegios o más derechos”.
Garcia-Page presidió en Albacete la reunión de la Comisión de Seguimiento de las Obras del Hospital de dicha capital, y se pronunció de esta forma ante las preguntas de los medios acerca de la relevancia de esta semana en la que el rey Felipe VI iniciará la ronda de consultas con distintos líderes políticos para proponer candidato a la investidura y donde prosiguen las negociaciones entre partidos.
El presidente castellano-manchego se mostró deseoso de alcanzar el “desbloqueo político” pero “siempre dentro del marco constitucional”, y garantizó que eso es lo que está intentado el Ejecutivo en funciones. “Si ha habido un segundo proceso electoral en España ha sido porque el Gobierno actual no se sometió a ningún tipo de concesión extra constitucional”, ha añadido.
Por otra parte, García-Page reivindicó un “nuevo y más justo modelo de financiación” dentro de la nueva legislatura, “que debe ser justo para las personas y no puede perderse en marañas terminológicas. Nación equivale a igualdad, y naciones es romper el concepto de igualdad”, ha sentenciado.
Por este motivo, aseguró que no va a plantearse “nada distinto” de lo que ya promulga la Constitución en el Artículo 14, “igualdad para todos los españoles y españolas”, y ha recordado que lo que se discute “no son quimeras ni eslóganes, es dinero. Estamos hablando de si podemos cumplir con las previsiones de nuestro Estatuto de Autonomía, que es tan estatuto como el resto de los que hay”, ha aseverado.