En el marco del juicio por el trágico asesinato de una mujer en Alovera el pasado 19 de mayo de 2021, se han presentado declaraciones de las forenses encargadas de realizar los informes preliminar y definitivo de autopsia en el cuerpo sin vida de la víctima. Según han manifestado durante su testimonio en la Audiencia Provincial de Guadalajara, la mujer no presentaba heridas defensivas típicas que indicaran que intentó defenderse del ataque.
Durante su interrogatorio, las médicos aseguraron que, en el caso de sufrir una agresión con arma blanca, es común encontrar heridas defensivas en las manos, como semi amputaciones de dedos, fruto de un forcejeo entre agresor y víctima por el control del arma. Sin embargo, en este caso, no se han encontrado indicios de este tipo de lesiones en las manos de la fallecida.
Las forenses también tuvieron la oportunidad de ver imágenes del apuñalamiento, destacando que de las diez puñaladas que recibió la víctima, cuatro fueron mortales de necesidad, especialmente la del cuello. Ante preguntas relacionadas con la defensa propia, las médicos afirmaron que, por instinto de supervivencia, nadie permitiría ser apuñalado sin intentar defenderse. En este caso, la falta de heridas defensivas sugiere que la víctima no percibió el ataque inminente y no tuvo oportunidad de reaccionar.
Es importante destacar que durante el testimonio de las forenses, se hizo hincapié en que no se encontraron indicios de una lucha entre las partes involucradas. La ausencia de defensa por parte de la víctima podría deberse a la falta de fuerzas, paralización o razones desconocidas en este momento.
En contraste con las declaraciones de las forenses, la fiscalía ha recordado que el acusado afirmó durante su declaración que hubo un forcejeo con la víctima. Ante esta discrepancia, la fiscalía solicita una condena de 24 años de prisión para el acusado, mientras que la acusación particular solicita un año adicional, considerando que se trató de un asesinato. Por su parte, la defensa argumenta que se trató de un homicidio y que el acusado únicamente actuó en defensa propia durante un forcejeo.
El juicio continúa desarrollándose y se espera que próximamente se presenten más pruebas y testimonios que arrojen luz sobre los hechos ocurridos aquel fatídico día. La búsqueda de justicia para la víctima y sus seres queridos sigue siendo el objetivo principal de este proceso judicial.