Tras superar una significativa crisis hídrica en el Campo de Calatrava, los municipios de Almagro, Ballesteros de Calatrava, Bolaños de Calatrava, Calzada, Cañada, Caracuel, Corral, Granátula, Moral, Pozuelo, Valenzuela y Villar del Pozo han recuperado la garantía de contar con un suministro de agua potable en condiciones sanitarias óptimas. Esto ha sido posible gracias a la conclusión de obras de emergencia, que tuvieron como finalidad asegurar este servicio esencial.
La consejera portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, informó en una rueda de prensa reciente que la escasez de agua derivada de la sequía del embalse de la Vega del Jabalón –principal fuente de abastecimiento para estos doce municipios– obligó a la ejecución de estas intervenciones el año pasado. Los trabajos, que finalizaron la semana pasada, eran imperativos, dada la insuficiencia y la baja calidad de las fuentes alternativas de agua que estaban siendo utilizadas por el Consorcio de abastecimiento de agua del Campo de Calatrava, llegando incluso a prohibirse su consumo.
Para solventar la crisis, fue necesaria la acción inmediata de la Agencia del Agua, que implementó soluciones de emergencia para incrementar y mejorar los recursos hídricos disponibles. Entre las medidas adoptadas se incluyó la instalación de una planta de ósmosis en Bolaños de Calatrava para la eliminación de nitratos y la mejora en la calidad del agua, la incorporación de un nuevo sondeo en Valenzuela de Calatrava para aumentar los suministros, así como la adecuación de equipamiento de sondeo en Almagro y la conexión de sondeo en Ballesteros de Calatrava. La inversión para estas importantes obras ascendió a cerca de un millón de euros.
Ahora, con el final de las obras, aproximadamente 40.000 habitantes de la región pueden disfrutar nuevamente de agua potable segura, poniendo fin a los problemas de abastecimiento que amenazaban la salud y el bienestar de la población del Campo de Calatrava.
