El término anglosajón “Mindfulness” se podría traducir como la conciencia o atención plena, es decir, estar aquí y ahora. Prestar más atención a una experiencia en el momento presente. Los beneficios de la práctica de esta actividad, son entre otros, aliviar la ansiedad, reducir el dolor crónico, mejorar la memoria funcional y la concentración, ayudar a dormir mejor, reducir los niveles de estrés o calmar la mente. Como novedad, en estos talleres pueden participar tantos socios de FibroReal como personas ajenas a la asociación.
El término anglosajón “Mindfulness” se podría traducir como la conciencia o atención plena, es decir, estar aquí y ahora. Prestar más atención a una experiencia en el momento presente. Los beneficios de la práctica de esta actividad, son entre otros, aliviar la ansiedad, reducir el dolor crónico, mejorar la memoria funcional y la concentración, ayudar a dormir mejor, reducir los niveles de estrés o calmar la mente. Como novedad, en estos talleres pueden participar tantos socios de FibroReal como personas ajenas a la asociación.
La concejala de Acción Social, Matilde Hinojosa, explicaba que desde el Ayuntamiento siempre ha habido una clara voluntad de apoyar a todas aquellas entidades y asociaciones que “realizan un trabajo de sensibilización de las problemáticas que defienden”. Añadía que FibroReal siempre utiliza “técnicas novedosas que hacen vivir y sentir la enfermedad de otra manera”.
La presidenta de FibroReal (Asociación de Enfermos de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica), Prado Estradas, incidía en la idea sobre la importancia que tiene para la asociación “mejorar la calidad de vida de las personas que sufren la enfermedad”. En su experiencia personal, los cambios de tiempo y los disgustos son condicionantes claros que afectan mucho al dolor, pudiendo provocar “dolores de estómago, colon irritable, pérdida de memoria o mareos” entre otros síntomas.
La psicóloga María Martín ha comentado que con esta iniciativa “se trata de conseguir una pequeña ayuda para las personas que sufren fibromialgia, reducir las experiencias desagradables como pueden ser el dolor u otro tipo de sintomatologías de carácter ansioso o depresivo, así como problemas de sueño”. Martín asegura que con dedicar 10 o 15 minutos, al día, se pueden obtener “muchos beneficios para paliar la sintomatología y hacer que los enfermos puedan llevar una vida mucho más plena que la de ahora”. También explicaba que “la parte psicológica es fundamental” y que con “pequeñas meditaciones guiadas se provoca que las personas tengan una actitud mucho más tolerante y puedan ver ese dolor, desde una forma externa, y aceptarlo como una sensación más del cuerpo, no como vivir con ese dolor”. La charla inicial ha sido en el exterior, aunque en las próximas se barajan distintas opciones dependiendo de la climatología.