La Fundación Franz Weber ha denunciado que ya hay 3 víctimas mortales y otras tantas personas con lesiones de diversa consideración como consecuencia de la convocatoria de encierros taurinos solo en el territorio de Castilla-La Mancha y critica la nula reacción de la Junta de Comunidades.
Los naturalistas señalan que entre las víctimas de cogidas se encuentra una persona menor de edad, que según diferentes informaciones tendría solo 7 años, y el contexto se habría producido en el término municipal de Pantoja tras, supuestamente, la huida de uno de los animales del recorrido.
Así, la ONG ya advirtió con respecto a los sucesos de El Casar (Guadalajara) que estas fugas son responsabilidad última de los ayuntamientos convocantes y de la Junta, en tanto en cuanto, autorizan tanto las presuntas medidas de seguridad como los protocolos de actuación.
FFW ha avanzado un escrito dirigido al Defensor del Pueblo para que investigue las lesiones provocadas a esta niña y el hecho de que existan menores en zonas de riesgo para su integridad física y su propia vida, al entender que se conculcan sus derechos fundamentales por parte de administraciones y tutores.
Este suceso tiene lugar mientras el Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas realiza la revisión de España sobre la Convención sectorial, donde la Fundación Franz Weber ha señalado la continua presencia de niñas, niños y adolescentes en la tauromaquia con, precisamente, situaciones de peligro para su salud.
Con tres cadáveres en un espectáculo público, los naturalistas consideran que la Junta de Comunidades debería tomar medidas inmediatas, la primera un decreto de prohibición de participación y acceso de menores, cuyo objetivo último es la protección estricta de estos grupos vulnerables.
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