El Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro ha dado un nuevo paso hacia la creación y la experimentación escénica con el lanzamiento de su programa de residencias artísticas, presentado este lunes por las principales autoridades locales y regionales. Este proyecto tiene como objetivo convertir a Almagro en un centro de producción teatral durante el mes de marzo, ampliando así su oferta cultural más allá de su festividad veraniega.
La inauguración del programa contó con la presencia de Irene Pardo, directora del Festival; Amador Pastor, consejero de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Castilla-La Mancha; María Jesús Pelayo, vicepresidenta primera de la Diputación de Ciudad Real; y Francisco Núñez, alcalde de Almagro. Juntos, resaltaron la importancia de este nuevo espacio para creadores emergentes, destacando que Almagro debe ser un motor de creación, además de ser un escaparate de las mejores propuestas vinculadas al Siglo de Oro.
El consejero Pastor reafirmó el compromiso de la Junta con el proyecto, mencionando una inversión de 25.000 euros destinada a apoyar los costes de acogida para los artistas, mientras el alcalde Núñez subrayó el impacto positivo de este tipo de iniciativas en la comunidad local, al atraer artistas a Almagro fuera de la temporada habitual del Festival.
La primera residencia artística estará a cargo de la directora Elisabet Altube, quien presentará su proyecto ‘Quien no cae, no se levanta’, basado en la obra de Tirso de Molina. La obra explorará la figura de una protagonista rebelde que desafía los estamentos sociales, con el objetivo de visibilizar a «mujeres vapuleadas en la sociedad» de épocas pasadas. Tras la residencia de Altube, programada para una semana, se desarrollarán los proyectos de Alberto Velasco, Emilio Manzano y Ana por Ana, validando así la propuesta de dar visibilidad a diferentes voces creativas hasta finales de marzo.
En un emotivo cierre, Irene Pardo recordó al actor Juan Margallo, fallecido recientemente, a quien consideró una figura esencial en la vida del teatro español. Con esta nueva iniciativa, el Festival de Teatro Clásico de Almagro no solo refuerza su compromiso con la cultura teatral, sino que también rinde homenaje a quienes han dejado huella en el ámbito escénico.